Trump se retracta de sus amenazas de guerra contra Irán
“No creo que sea una buena idea (…) no veo que suceda algo similar”, de este modo descartó Trump este miércoles la posibilidad de que Estados Unidos se involucre en una guerra con Irán.
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Trump se retracta de sus amenazas de guerra contra Irán
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quizás tiene alguna conciencia de los peligros de una aventura militar contra Irán y decidió retirar sus amenzas guerreristas hacia la nación persa a la que responsabiliza por los últimos acontecimientos en Irak.
“No creo que sea una buena idea (…) no veo que suceda algo similar”, de este modo descartó Trump este miércoles la posibilidad de que Estados Unidos se involucre en una guerra con Irán.
Desde Palm Beach, Florida, Trump habló con los periodistas a quienes dijo que es un defensor de la paz, cuando poco antes había amenazado a la República Islámica con que pagaría un “alto precio”, después del ataque de una multitud de iraquíes a la embajada estadounidense en Bagdad.
“Yo quiero tener paz. Me gusta la paz. E Irán debería querer tener paz más que nadie”, según expresó el mandatario republicano.
Manifestantes iraquíes asaltaron el martes la sede diplomática de Washington en protesta por los ataques de Estados Unidos a posiciones de las fuerzas populares iraquíes, Unidades de Movilización Popular de Irak (Al-Hashad Al Shabi, en árabe).
Trump afirmó que el bombardeo respondía a un ataque con cohetes contra una base militar estadounidense en Irak, del cual responsabilizó a Irán en el marco de una reacción de esperar.
Teherán no tardó en rechazar los infundios de Trump sobre cualquier implicación de Irán en los ataques a la base y la embajada estadounidenses en Irak.
En esta línea, la Cancillería persa ha calificado de “sorprendente” que los funcionarios de EE.UU., tras bombardear las posiciones de las Al-Hashad Al-Shabi —que forman parte de las Fuerzas Armadas iraquíes— y dejar decenas de muertos y heridos, achaquen sus propios actos de crueldad a la República Islámica.
El Gobierno iraní atribuye las acusaciones de Washington a su intento por “justificar el bombardeo y el asesinato de personas, lo que viola las normas internacionales”.