Las fuerzas de ocupación de "Israel" lanzaron intensas agresiones aéreas en la mañana del martes contra zonas residenciales, campos de refugiados e infraestructura pública de la Franja de Gaza.

Fuentes médicas palestinas informaron de una cifra preliminar de 109 mártires, la mayoría de los cuales eran niños, y cientos de otros heridos durante la incursión.

El corresponsal de Al Mayadeen reportó que decenas de ataques aéreos israelíes simultáneos impactaron diversos puntos del enclave palestino en menos de diez minutos.

Los informes indicaron que los misiles de la ocupación golpearon viviendas, mezquitas, escuelas y albergues para desplazados, especialmente en Khan Younis y Rafah.

Se produjeron incendios en las tiendas de refugiados al oeste de Khan Younis después de ataques israelíes directos, dejando a muchos civiles atrapados bajo los escombros.

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Por su parte, el servicio militar y de inteligencia israelí, Shin Bet, confirmó los ataques en un comunicado oficial. Afirmó que se llevaron a cabo bajo directivas políticas.

Los medios de comunicación israelíes citaron, además, a un alto funcionario que declaró: "El alto al fuego ha terminado".

El movimiento Hamas condenó el nuevo ataque y acusó al primer ministro de "Israel", Benjamín Netanyahu, de reanudar una campaña de genocidio contra civiles desarmados.

Hamas instó a la Liga Árabe, la Organización para la Cooperación Islámica y las Naciones Unidas a intervenir urgentemente, instando a la aplicación de la Resolución 2735 del Consejo de Seguridad para detener la ofensiva.

Fuentes palestinas informaron de un aumento de los movimientos militares israelíes a lo largo del corredor de Filadelfia en el sur de Gaza, lo que genera preocupación por una posible escalada terrestre.

La Casa Blanca reconoció que la ocupación israelí consultó con Estados Unidos antes de lanzar los ataques, pero no reveló detalles de las conversaciones.

Mientras tantos, los equipos de rescate de Gaza enfrentan dificultades para responder a las llamadas de socorro debido a la grave escasez vehículos operativos, lo que deja a muchos heridos sin ayuda médica inmediata.