El Reino Unido declaró este martes que no se pueden permitir más retrasos de "Israel" en autorizar la entrada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza.

La ministra de Asuntos Exteriores, Yvette Cooper, expresó esta posición después de que un envío de más de mil 100 tiendas de campaña, remitido por Londres, tardara más de un año en llegar al enclave.

Cooper manifestó su preocupación por la posibilidad de que otros cargamentos de ayuda financiados por el Reino Unido no puedan ingresar a Gaza, pese al anuncio de alto al fuego.

La ministra subrayó la necesidad de abrir todos los cruces fronterizos hacia el territorio para permitir la entrada de asistencia sin obstáculos, advirtiendo que "la situación aún es peligrosa".

Añadió que la llegada de ayuda constituye un paso positivo, pero solo un avance inicial hacia el amplio proceso de reconstrucción que se requiere con urgencia.