Cadena de atentados sacuden zonas controladas por grupos extremistas en Siria
Por lo menos 11 personas murieron y otras 30 fueron lesionadas en la explosión de un coche bomba en el centro de la ciudad de Afrín, al noroeste de Alepo, 450 kilómetros al norte de la capital, informaron activistas.

Una cadena de atentados sacudió a zonas controladas por grupos radicales armados y remanentes de bandas de terroristas en las provincias sirias de Alepo y Hassakeh, provocó al menos 16 muertos y unos 37 heridos, según fuentes locales.
La explosión de un coche bomba en el centro de la ciudad de Afrín, al noroeste de Alepo, 450 kilómetros al norte de la capital, causó 11 víctimas fatales y 30 sufireron lesiones, informaron activistas.
Agregaron que la mayoría de las víctimas son niños y mujeres, mientras las casas en el lugar sufrieron considerables daños.
En marzo del año pasado, grupos radicales armados apoyados por las tropas turcas, ocuparon la ciudad de Afrín donde expulsaron a la mayoría de sus habitantes y los sustituyeron con familias de los terroristas que fueron derrotados a manos del ejército sirio en varias provincias.
En la ciudad de Qamishli, ubicada a 700 kilómetros al nordeste de Damasco, explotó un coche bomba frente a la iglesia de la Virgen María.
El atentado terrorista dejó cinco fallecidos y heridas a otros siete, reportó la agencia nacional siria SANA.
Por otro lado, tres motocicletas minadas explotaron en la ciudad de Hassakeh, cabecera de la provincia con el mismo nombre, ubicada a 635 km al nordeste de la capital.
Las explosiones fueron simultáneas y sacudieron los barrios de Mashjamah, Salhieh y Kalaseh, y aún no se dio a conocer la cifra de víctimas.
Al mismo tiempo en que las zonas liberadas del terrorismo por el ejército sirio viven una estabilidad que se consolida día tras día, continúa el caos de seguridad en las zonas controladas por las milicias kurdas y los grupos terroristas donde prevalecen las pugnas.