La confesión de Mike Pompeo: Unir a la oposición venezolana algo "tremendamente difícil"
Las palabras de Pompeo representan un brusco cambio en la línea oficial del gobierno de Trump que promueve la presunta unidad y la fuerza de la oposición liderada por el diputado Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional (en desacato desde 2016).
En una conversación privada a la que tuvo acceso el diario The Washington Post, el secretario de Estado Mike Pompeo, admitió lo “tremendamente difícil” que ha sido para EE.UU. “mantener unida a la oposición” venezolana.
Pompeo advirtió en una reunión privada que las divisiones internas de la oposición venezolana están minando los esfuerzos conjuntos que tratan de desalojar al gobernante Nicolás Maduro, reportó este miércoles el influyente periódico estadounidense.
“Nuestro problema, que es mantener a la oposición unida, ha demostrado ser extremadamente difícil”, indicó.
El material aseguró que el jefe de la diplomacia de EE.UU. hizo esas declaraciones en una reunión la semana pasada en Nueva York, a pesar del apoyo oficial de Washington al opositor Juan Guaidó, quien se autoproclamó el 23 de enero como presidente interino.
Sin embargo, cuatro meses después -precisó el artículo-, "su disputa con Maduro por el poder se ha estancado", en un país en dificultdes económicas debido a la intensa campaña de sanciones y la guerra económica impuesta desde la Casa Blanca.
El periódico recooce que el predidente Maduro "ha soportado una intensa campaña de sanciones de Estados Unidos" y además dice que es respaldado por Rusia, China y Cuba, así como por su alto mando militar.
“El momento en que Maduro se vaya, todos van a levantar la mano y (decir) ‘Tómenme a mí, yo soy el próximo presidente de Venezuela’. Habría más de 40 personas que creen que son los herederos legítimos de Maduro”, aseveró Pompeo, según el medio de prensa.
El alto funcionario habría culpado a las fracciones opositoras enfrentadas del fracaso del intento de Guaidó de impulsar un derrocamiento militar contra Maduro el 30 de abril.
Los comentarios brindan una rara ventana a los desafíos que enfrenta el gobierno de Donald Trump, ya que el impulso para expulsar a Maduro y algunos de los países que inicialmente respaldaron a la oposición exploran ahora vías diplomáticas alternativas para resolver la crisis.
Pompeo expresó su confianza en que Maduro finalmente se vería obligado a abandonar el poder, pero "no podría decirte el momento", confesó.
Señaló que la dificultad de unir a la oposición no solo se ha manifestado en "público durante estos últimos meses, sino que desde el día en que me convertí en director de la CIA fue algo que estuvo en el centro de lo que el presidente Trump estaba tratando de hacer".
“Hemos tratado de apoyar varias instituciones (...) para unir a la oposición”, continúa la en otra parte la grabación citada por el Post.
Las palabras de Pompeo representan un brusco cambio en la línea oficial del gobierno de Trump que promueve la presunta unidad y la fuerza de la oposición liderada por el diputado Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional (en desacato desde 2016).