El jefe de la delegación de la República Árabe Siria a las conversaciones de Astana, Bashar Jaafari, dijo que la declaración final de la 12ª ronda de las conversaciones de Astana incluyen puntos positivos, algunos de los cuales son novedosos, especialmente el rechazo a la decisión de la administración estadounidense sobre el Golán Sirio ocupado.

Jaafari expresó que la agenda de la 12ª ronda de Astana fue rica y se centró en la cláusula de la lucha antiterrorista, incluso entre aquellos que habían negado durante años la existencia del terrorismo en Siria.

“Hay terrorismo en Idleb, que es reconocido por todos, incluida la delegación del régimen turco en las reuniones de Astana, lo cual exige acabar con ello de forma completa”, agregó.

Asimismo, destacó que la parte turca debe efectuar el compromiso de sacar a las organizaciones terroristas de Idleb y la implementación del Acuerdo de Sochi.

El diplomático sirio señaló que todas las medidas económicas unilaterales y coercitivas por parte de los Estados Unidos y la Unión Europea contra Siria son ilegales porque no corresponden a una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.

“Estas medidas son terrorismo económico que se añade al terrorismo político llevado a cabo por estos países”, aseveró.

Jaafari destacó que el dilema en las conversaciones de Astana es la falta de seriedad de la parte turca en el cumplimiento de sus compromisos, y señaló que la presencia de tropas en el territorio sirio sin la petición del gobierno s ilegal y deben retirarse de inmediato.

Añadió que Turquía ocupa unos seis mil kilómetros cuadrados del territorio sirio, a pesar de su retórica de preservar la integridad territorial y la soberanía de Siria.

Señaló que el régimen turco introdujo decenas de lanzacohetes para las organizaciones terroristas en Idleb y materiales tóxicos para usarlos contra civiles, y acusar de ello al Ejército Árabe Sirio.

Jaafari enfatizó que Siria no permitirá a nadie fragmentarla y esta es una línea roja.

Estados Unidos sigue reteniendo a miles de desplazados sirios en el campamento de Rukban, y la ONU confirmó que la mayoría de ellos desean regresar a sus hogares, advirtió.