La Liga por los Derechos de la Mujer Libanesa recibió hoy muestras solidarias y fraternales de numerosas colegas del mundo durante una ceremonia por el Día Internacional de la Mujer en esta capital. 
Mensajes de Cuba, Jordania, Portugal, Italia, Venezuela, Sudán, Iraq, Bahréin, y México expresaron su apoyo y sostén a la entidad de este país que batalla en todos los escenarios por la igualdad de género. 

La presidenta de la Liga Aida Nasrallah saludó la lucha de las mujeres en todo el mundo y homenajeó a sus colegas de generaciones anteriores, agradeciendo sus aportes tan valiosos en el proyecto de su organización. 

Nasrallah destacó la lucha de la Mujer en Palestina, Sudán, Venezuela y Cuba, y en todas partes frente al imperialismo y al sionismo. 
Y en realidad hay muchas razones para impulsar a la liga en ese empeño, pues, pese a que El Líbano resulta de los más tolerantes y flexibles en la comunidad árabe, el sector femenino recibe un trato muy discriminatorio a nivel de las leyes vigentes. 

No transmiten nacionalidad a sus hijos, pierden su custodia al divorciarse, el matrimonio prematuro, y reciben una mínima porción en caso de herencia, así como la falta de leyes civiles a nivel del código de la familia, son algunas de las dificultades a que se enfrentan las féminas en el país de los cedros. 
De ahí que las manifestaciones en su favor se originen en casi todos los puntos del planeta con la esperanza de que en algún día la situación cambiará para bien de ellas. 

Un día lluvioso y frío se registró a lo largo del día escogido por la Liga libanesa, aunque no cupo un invitado más en el salón del hotel Golden Tulip Serenade de esta capital. 
Allí se reunieron representantes de todas las ciudades del país y de otras nacionalidades para café o té por medio intercambiar sobre sus experiencias y objetivos en cada comunidad.
La luchadora femenista venezolana Zaida Montes, emitió frases de solidaridad para su amado país que ahora enfrenta la hostilidad y agresión del gobierno de Estados Unidos. 
"Será una batalla larga, pero seguro ganaremos", vaticinó con el convencimiento característico de una mujer que forjó sus conocimientos en la Unión Soviética y los ha fortalecido a lo largo de los años.