El viceministro sirio de Asuntos Exteriores, Faisal al-Miqdad, dijo que el retiro o la supervivencia de las fuerzas iraníes o de Hizbulah en Siria no está en la mesa de discusión, dado que se trata de un asunto del gobierno sirio.

En entrevista concedida a Sputnik, Al-Miqdad dijo que el gobierno de la República Árabe Siria ha pedido a las fuerzas amigas y aliadas que los ayuden en la guerra contra el terrorismo. "Entre estas fuerzas están las rusas, expertos iraníes y hermanos en Hizbulah. Todos estos partidos están en plena coordinación con el Estado sirio en la guerra contra el terrorismo".

"Este tema de la retirada de Irán y Hizbulah de Siria no está sujeto a debate porque entra en el contexto de la soberanía de Siria sobre quién está en su territorio y quién no, por lo que este tema no está sobre la mesa", dijo.

Sobre la demanda rusa de una salida integral de todas las fuerzas extranjeras desde Siria con el inicio del proceso político, Al-Miqdad dijo: "No creo que los amigos rusos en absoluto signifiquen las fuerzas o ejércitos que ingresaron a Siria de manera legítima y con el consentimiento del gobierno... Es jurisdicción exclusiva de Siria, las fuerzas que ingresaron en el país sin el consentmiento del gobierno sirio son fuerzas de ocupación que apoyan directamente el terrorismo en Siria".

El vicecanciller manifestó su esperanza de que Siria retorne a las buenas relaciones con Turquía, pero señaló que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, destruyó las relaciones entre los dos países. Agregó que este debe "dejar de apoyar a los terroristas en Siria y retirar sus fuerzas".

Al-Miqdad dijo que cada centímetro volverá al control del estado sirio, y subrayó que "esta es nuestra decisión y la decisión de nuestros amigos, y la legitimidad internacional y las Naciones Unidas está a su favor".

Explicó que después de terminar con la amenaza terrorista directa a Damasco, la puerta está abierta para ir hacia el norte o hacia el sur. Señaló que el gobierno sirio busca un acuerdo sin derramamiento de sangre, pero si los grupos terroristas insistieran en la confrontación no habría otra opción.

Señaló que las conversaciones de Washington sobre retirar sus fuerzas de Siria y reemplazar a las fuerzas árabes apuntan a arrastrar a Damasco a un conflicto con ella, y describió ello como "muy peligroso".

Apuntó que la coalición estadounidense bombardeó los pozos de petróleo en Siria para no beneficiar al estado sirio de ellos y obligarlos a pagar millones para calificar.

También confirmó que Moscú y Damasco proporcionaron pruebas de los presuntos ataques químicos y proporcionaron 18 testigos que confirmaron que "el incidente fue representativo".

La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) celebró una audiencia el 27 de abril pasado para escuchar el testimonio de 17 testigos presentados por el representante de Rusia para probar la fabricación del presunto ataque químico en la ciudad de Duma.

La misión rusa acusó a las autoridades británicas de fabricar el presunto ataque químico, diciendo que las organizaciones que fabricaron el ataque químico fueron financiadas por Londres y Washington.

Al-Miqdad llamó a los países árabes a no participar en la masacre del pueblo sirio, sino impedir una mayor implicación en el conflicto que azota a Siria desde 2011.

El diplomático sirio rechazó el constante apoyo ofrecido por EE.UU. a los grupos armados sirios. “Consideramos que el oxígeno les llega a los grupos terroristas en Siria desde EE.UU.”, durante todo el conflicto, todas estas bandas han recibido “financiación y armas” desde Washington, agregó.