Samuel señaló que "existe una necesidad urgente por parte de los dos lados; palestino e israelí, para resolver el conflicto y no hay interés en que el conflicto continúe".

Agregó que "la solución de los estados es política y no militar".

Al referirse a la guerra en Yemen, el portavoz dijo que "el gobierno británico reconoce la necesidad urgente del pueblo yemenita y su sufrimiento", y confirmó que "el uso de la política de inanición en Yemen es inaceptable".

En ese sentido, indicó que "existe una decisión de las Naciones Unidas de restaurar el gobierno legítimo en Yemen". Añadió que Gran Bretaña busca un acuerdo político y diplomático en Yemen y subrayó la necesidad de abrir puertos para que llegue la ayuda humanitaria a los pobladores de esa nación árabe.

Samuel instó a Ansar Allah a volver al diálogo y no retirarse de lo acordado anteriormente".

En ese contexto, añadió que "el gobierno británico habla con sus aliados en Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos para comprender la necesidad de abrir una nueva página en Yemen, pero si los hutíes actúan con furia, ¿cómo podemos presionar a Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos para que detengan la campaña militar?”, preguntó.