Bassil: "Si Arabia Saudita tiene problemas con Irán y Hizbulah, que los resuelva con ellos y no con todos los libaneses"
El canciller libanés, Gebran Bassil, dijo que si el problema de Arabia Saudita es con Hizbulah e Irán, pues debería resolverlo con dichas partes no con todos los libaneses, e hizo hincapié en que la permanencia del primer ministro libanés Saad Hariri en una situación misteriosa hace que todo lo que dice sea también misterioso.
Añadió: "Para salir de este dilema Hariri debe regresar a El Líbano”.
En un discurso pronunciado después de reunirse con el ministro de Exteriores británico, Boris Johnson en la capital Londres, Bassil destacó que la prioridad hoy es el regreso de Hariri a Beirut.
Indicó que el presidente libanés Michel Aoun escuchará atentamente todo lo que Hariri querrá decir sobre el tema de la renuncia a su cargo.
En un discurso pronunciado después de reunirse con el ministro de Exteriores británico, Boris Johnson en la capital Londres, Bassil destacó que la prioridad hoy es el regreso de Hariri a Beirut.
Indicó que el presidente libanés Michel Aoun escuchará atentamente todo lo que Hariri querrá decir sobre el tema de la renuncia a su cargo.
Bassil dijo que los acontecimientos recientes en El Líbano amenazan el conjunto de la trayectoria positiva que venía trazando El Líbano en los últimos meses.
Agregó: "Está claro que Europa está a favor de las leyes y convenciones internacionales que hoy están expuestas al riesgo de ser violadas por lo que se podría crear precedentes en ese sentido”.
La declaración de Bassil se produjo después de una clara posición de Aoun, en la que consideró que Hariri está retenido en Arabia Saudita, describiendo el acto como una acción hostil contra El Líbano.
Johnson, por su parte, hizo hincapié en la preocupación de su país por la estabilidad de El Líbano y por mantener al país alejado de cualquier ajuste de cuentas regional.
El Ministerio de Relaciones Exteriores británico exigió el respeto de la soberanía, la independencia y la estabilidad de El Líbano, así como el regreso de Hariri sin más demora.
La declaración de Bassil se produjo después de una clara posición de Aoun, en la que consideró que Hariri está retenido en Arabia Saudita, describiendo el acto como una acción hostil contra El Líbano.
Johnson, por su parte, hizo hincapié en la preocupación de su país por la estabilidad de El Líbano y por mantener al país alejado de cualquier ajuste de cuentas regional.
El Ministerio de Relaciones Exteriores británico exigió el respeto de la soberanía, la independencia y la estabilidad de El Líbano, así como el regreso de Hariri sin más demora.
