¡Berta Cáceres Vive y se multiplica!
A un año del asesinato de la líder hondureña Berta Cáceres, su organización de base Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) denunció que temibles intereses se confabularon para diseñar y ejecutar la acción con la que se quiso pretendió acallar la voz de la fiel exponente de la resistencia ancestral indígena, pero Berta no murió, vive y se multiplica.

Según un reporte de Resumen Latinoamericano, la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras hizo un llamado global para, al cumplirse un año del asesinato de Berta, se realicen manifestaciones ante las embajadas de Honduras en los diferentes países con el objetivo de seguir exigiendo justicia.
También la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres se sumó a la campaña #JusticiaParaBerta y convocó a manifestarse frente a la Embajada de Honduras.
Recientemente, se reveló que los asesinos de Berta Cáceres fueron entrenados en EE.UU. La información se basa en registros de las fuerzas armadas hondureñas y en documentos judiciales a los que accedió la periodista Nina Lakhani, quien publicó un artículo en el diario inglés The Guardian el pasado 28 de febrero.
Según estas fuentes, el mayor Mariano Díaz Chávez y el teniente retirado Douglas Giovanny Bustillo recibieron en 1997 entrenamiento en la tristemente célebre Escuela de las Américas, que formó durante décadas a las fuerzas militares latinoamericanas en la Zona del Canal de Panamá y desde 1984 fue localizada en Fort Benning, Georgia, bajo el nombre de Instituto del Hemisferio Occidental para la Cooperación en Seguridad.
Berta Cáceres llevaba años recibiendo graves amenazas de muerte, llegando incluso a ser encarcelada por su labor en la defensa de los derechos indígenas, y por lo mismo contaba con medidas cautelares por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Berta Cáceres y el COPINH -subraya Resumen Latinoamericano- fueron víctimas de hostigamientos por parte del Estado hondureño a través de la Policía Nacional, el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) e incluso la jerarquía de la iglesia Católica, dado que el cardenal Óscar Andrés Rodríguez prohibió a los feligreses organizarse en COPINH y escuchar sus medios de comunicación comunitarios.
También la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres se sumó a la campaña #JusticiaParaBerta y convocó a manifestarse frente a la Embajada de Honduras.
Recientemente, se reveló que los asesinos de Berta Cáceres fueron entrenados en EE.UU. La información se basa en registros de las fuerzas armadas hondureñas y en documentos judiciales a los que accedió la periodista Nina Lakhani, quien publicó un artículo en el diario inglés The Guardian el pasado 28 de febrero.
Según estas fuentes, el mayor Mariano Díaz Chávez y el teniente retirado Douglas Giovanny Bustillo recibieron en 1997 entrenamiento en la tristemente célebre Escuela de las Américas, que formó durante décadas a las fuerzas militares latinoamericanas en la Zona del Canal de Panamá y desde 1984 fue localizada en Fort Benning, Georgia, bajo el nombre de Instituto del Hemisferio Occidental para la Cooperación en Seguridad.
Berta Cáceres llevaba años recibiendo graves amenazas de muerte, llegando incluso a ser encarcelada por su labor en la defensa de los derechos indígenas, y por lo mismo contaba con medidas cautelares por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Berta Cáceres y el COPINH -subraya Resumen Latinoamericano- fueron víctimas de hostigamientos por parte del Estado hondureño a través de la Policía Nacional, el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) e incluso la jerarquía de la iglesia Católica, dado que el cardenal Óscar Andrés Rodríguez prohibió a los feligreses organizarse en COPINH y escuchar sus medios de comunicación comunitarios.

La mañana del 3 de marzo de 2016 Berta Cáceres se encontraba en su vivienda, preparándose para presentar alternativas al proyecto hidroeléctrico Agua Zarca, en la misma vivienda se encontraba el ambientalista mexicano Gustavo Castro. Los asesinos forzaron las puertas de su vivienda en La Esperanza para cometer el crimen, posteriormente Castro escuchó cuando Berta preguntó: ¿Quién está ahí?, y un sicario le disparó y la mató e hirió a Gustavo Castro.
El 1 de octubre de 2016, María Luisa Ramos, magistrada de la Corte Suprema de Apelaciones Penal, quien tenía en su poder los expedientes del asesinato de Berta Cáceres, fue asaltada, y los expedientes fueron robados.
Hasta ahora van ocho personas capturadas y señaladas como responsables del asesinato. Tres de ellos son militares hondureños, quienes habrían actuado de sicarios a favor de los intereses empresariales hidroeléctricos que involucra una alianza comercial para construir cuatro represas hidroeléctricas.
Los actores son: La compañía china Sinohydro (la mayor compañía constructora de presas del mundo), la Corporación Financiera Internacional (CFI) del Banco Mundial y la compañía hondureña Desarrollos Energéticos S. A. (DESA) (ver también Empresa Nacional de Energía Eléctrica).
Por su parte, un comunicado emitidos por las organizaciones del ALBA Movimientos considera a Berta Cáceres un símbolo de la época y los valores que inspiran a la transformación social, porque en su lucha se conjugaron las grandes luchas de todos los pueblos contra el patriarcado que desprecia a las mujeres luchadoras en defensa de sus pueblos, contra un sistema colonizador de territorios y homogeneizador de culturas, contra un sistema depredador de la naturaleza que mercantiliza y destruye todas sus formas de vida, de un capitalismo cada día más salvaje que convierte en víctimas a la humanidad y asesina a quienes quieren levantar la bandera de la dignidad.
La memoria de Berta -indica el comunicado- llama a mantener viva la lucha al lado del hermano pueblo de Honduras que día a día lucha contra la acción de un régimen golpista y criminal, que desprecia la vida, y ha puesto al territorio hondureño a merced del gran capital transnacional.
No descansaremos hasta que se haga justicia por el asesinato de nuestra hermana Berta Cáceres, hasta que se haga justicia por todas las defensoras y defensores del territorio asesinados, hasta que cese la impunidad de los perpetuadores amparados en la elite política y empresarial hondureña, asimismo, nos solidarizamos con la lucha del COPINH y su legitimo grito en contra de la neo-colonización y militarización del territorio hondureño, detaca el texto de ALBA Movimientos.
El 1 de octubre de 2016, María Luisa Ramos, magistrada de la Corte Suprema de Apelaciones Penal, quien tenía en su poder los expedientes del asesinato de Berta Cáceres, fue asaltada, y los expedientes fueron robados.
Hasta ahora van ocho personas capturadas y señaladas como responsables del asesinato. Tres de ellos son militares hondureños, quienes habrían actuado de sicarios a favor de los intereses empresariales hidroeléctricos que involucra una alianza comercial para construir cuatro represas hidroeléctricas.
Los actores son: La compañía china Sinohydro (la mayor compañía constructora de presas del mundo), la Corporación Financiera Internacional (CFI) del Banco Mundial y la compañía hondureña Desarrollos Energéticos S. A. (DESA) (ver también Empresa Nacional de Energía Eléctrica).
Por su parte, un comunicado emitidos por las organizaciones del ALBA Movimientos considera a Berta Cáceres un símbolo de la época y los valores que inspiran a la transformación social, porque en su lucha se conjugaron las grandes luchas de todos los pueblos contra el patriarcado que desprecia a las mujeres luchadoras en defensa de sus pueblos, contra un sistema colonizador de territorios y homogeneizador de culturas, contra un sistema depredador de la naturaleza que mercantiliza y destruye todas sus formas de vida, de un capitalismo cada día más salvaje que convierte en víctimas a la humanidad y asesina a quienes quieren levantar la bandera de la dignidad.
La memoria de Berta -indica el comunicado- llama a mantener viva la lucha al lado del hermano pueblo de Honduras que día a día lucha contra la acción de un régimen golpista y criminal, que desprecia la vida, y ha puesto al territorio hondureño a merced del gran capital transnacional.
No descansaremos hasta que se haga justicia por el asesinato de nuestra hermana Berta Cáceres, hasta que se haga justicia por todas las defensoras y defensores del territorio asesinados, hasta que cese la impunidad de los perpetuadores amparados en la elite política y empresarial hondureña, asimismo, nos solidarizamos con la lucha del COPINH y su legitimo grito en contra de la neo-colonización y militarización del territorio hondureño, detaca el texto de ALBA Movimientos.

La líder hondureña Berta Cáceres también fue recordada en Argentina. En Buenos Aires se leyó un manifiesto en la embajada de Honduras, rodeada por numerosos efectivos policiales. Luego en la habitual ronda de los jueves de las Madres de Plaza de Mayo, Nora Cortiñas y Mirtha Baravalle, decenas de militantes populares marcharon con las Madres portando pancartas y fotos de Berta.
Más tarde, frente al Obelisco porteño se realizó un acto político-cultural reivindicando la lucha de la militante hondureña. Allí participaron numerosas organizaciones sociales y populares y también hablaron Nora y Mirtha, Madres Linea Fundadora.
Desde ese lugar salió una marcha de antorchas que llegó hasta la puerta de la embajada hondureña, donde volvieron a repetirse las consignas: “alerta, por aquí camina Berta”, o “Berta vive, el COPINH sigue”, en referencia a la organización popular indígena que lideraba la militante popular asesinada.
Este viernes se prevé un acto en el local de ATE, Belgrano 2527 y el sábado en la sede de Pañuelos en Rebeldía habrá un encuentro de mujeres latinoamericanas y militantes populares para enlazar la lucha de Berta con el próximo paro nacional y mundial de mujeres.
Más tarde, frente al Obelisco porteño se realizó un acto político-cultural reivindicando la lucha de la militante hondureña. Allí participaron numerosas organizaciones sociales y populares y también hablaron Nora y Mirtha, Madres Linea Fundadora.
Desde ese lugar salió una marcha de antorchas que llegó hasta la puerta de la embajada hondureña, donde volvieron a repetirse las consignas: “alerta, por aquí camina Berta”, o “Berta vive, el COPINH sigue”, en referencia a la organización popular indígena que lideraba la militante popular asesinada.
Este viernes se prevé un acto en el local de ATE, Belgrano 2527 y el sábado en la sede de Pañuelos en Rebeldía habrá un encuentro de mujeres latinoamericanas y militantes populares para enlazar la lucha de Berta con el próximo paro nacional y mundial de mujeres.
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Solidaridad argentina con Berta Cáceres. Foto: Resumen Latinoamericano -
Solidaridad argentina con Berta Cáceres. Foto: Resumen Latinoamericano -
Solidaridad argentina con Berta Cáceres. Foto: Resumen Latinoamericano -
Solidaridad argentina con Berta Cáceres. Foto: Resumen Latinoamericano -
Solidaridad argentina con Berta Cáceres. Foto: Resumen Latinoamericano -
Solidaridad argentina con Berta Cáceres. Foto: Resumen Latinoamericano