Acuerdo de paz será definitivo, afirma Santos
El presidente Juan Manuel Santos afirmó que el acuerdo de paz firmado con las FARC-EP es superior al previo porque recoge esperanzas y observaciones de la mayoría de los colombianos, ademas reiteró que será el definitivo para construir la paz.

Tal texto contempla visiones de quienes votaron por el Sí en el plebiscito y de un elevado porcentaje de los simpatizantes del No, insistió el mandatario en el capitalino Teatro Colón, sede de la ceremonia protocolaria.
Este jueves el gobernante y el líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), Timoleón Jiménez, suscribieron el trascendental documento con el que se comprometieron nuevamente a terminar el largo conflicto entre ambas partes, y volvieron a estrecharse las manos en señal de reconciliación.
El tratado tiene como base el inicial oficializado en Cartagena de Indias y rechazado luego en el plebiscito de octubre por la mayoría de los votantes.
Santos recordó que el acuerdo es fruto de un diálogo abierto y franco con todos los sectores de la sociedad en Colombia y de un proceso riguroso de renegociación de las delegaciones en La Habana.
Señaló que el mismo permite trabajar juntos como nación para recuperar las regiones más castigadas por la confrontación y aprovechar oportunidades de crecimiento y progreso.
Santos reiteró que el pacto será refrendado en el Congreso, el cual estará encargado también de elaborar las leyes de la paz.
Demostremos en un mundo polarizado que podemos ser ejemplo al poner al país por encima de los intereses políticos, concluyó.
Este jueves el gobernante y el líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), Timoleón Jiménez, suscribieron el trascendental documento con el que se comprometieron nuevamente a terminar el largo conflicto entre ambas partes, y volvieron a estrecharse las manos en señal de reconciliación.
El tratado tiene como base el inicial oficializado en Cartagena de Indias y rechazado luego en el plebiscito de octubre por la mayoría de los votantes.
Santos recordó que el acuerdo es fruto de un diálogo abierto y franco con todos los sectores de la sociedad en Colombia y de un proceso riguroso de renegociación de las delegaciones en La Habana.
Señaló que el mismo permite trabajar juntos como nación para recuperar las regiones más castigadas por la confrontación y aprovechar oportunidades de crecimiento y progreso.
Santos reiteró que el pacto será refrendado en el Congreso, el cual estará encargado también de elaborar las leyes de la paz.
Demostremos en un mundo polarizado que podemos ser ejemplo al poner al país por encima de los intereses políticos, concluyó.

Por su parte, el máximo líder de las FARC-EP, Timoleón Jiménez, reiteró su llamado para que los colombianos usen la palabra como su única arma, tras la firma del segundo pacto de paz con el Gobierno Nacional.
Durante la ceremonia protocolaria, el jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) afirmó que el acuerdo rubricado es fruto del aporte de grupos de víctimas y de todos los ciudadanos que respaldaron en las calles y otros escenarios los diálogos a favor de la distensión.
El pueblo está harto de violencia, de intolerancia, de estigmatizaciones, quiere cambios profundos (...) que cese la corrupción, el engaño; la primera demanda nacional es que se ponga fin al empleo de las armas en la política, que se garantice el derecho a disentir, a hacer oposición, a protestar contra leyes injustas, contra la arbitrariedad, añadió.
Jiménez abogó igualmente por el respeto a la vida y a la libertad de pensamiento.
Según el dirigente de las FARC-EP, con el documento firmado este jueves no se deponen posiciones ideológicas o políticas, sino que se concluye de manera definitiva la guerra entre los dos lados para confrontar civilizadamente las contradicciones.
Reclamamos su pronta refrendación e implementación, insistió el comandante guerrillero, quien criticó el desalojo del campamento por la paz levantado en la plaza Bolívar, de esta capital, así como las intimidaciones y homicidios contra activistas sociales y militantes de la plataforma Marcha Patriótica.
No más asesinatos de líderes sindicales, agrarios o populares, de reclamantes de tierras, ni de opositores de izquierda, no más amenazas ni hostilidades, exigió Timochenko, quien manifestó su respeto hacia los adversarios y les pidió trabajar unidos por un mejor país.
Los gobiernos de Venezuela, Ecuador y Francia felicitaron el acuerdo firmado en Colombia.
Durante la ceremonia protocolaria, el jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) afirmó que el acuerdo rubricado es fruto del aporte de grupos de víctimas y de todos los ciudadanos que respaldaron en las calles y otros escenarios los diálogos a favor de la distensión.
El pueblo está harto de violencia, de intolerancia, de estigmatizaciones, quiere cambios profundos (...) que cese la corrupción, el engaño; la primera demanda nacional es que se ponga fin al empleo de las armas en la política, que se garantice el derecho a disentir, a hacer oposición, a protestar contra leyes injustas, contra la arbitrariedad, añadió.
Jiménez abogó igualmente por el respeto a la vida y a la libertad de pensamiento.
Según el dirigente de las FARC-EP, con el documento firmado este jueves no se deponen posiciones ideológicas o políticas, sino que se concluye de manera definitiva la guerra entre los dos lados para confrontar civilizadamente las contradicciones.
Reclamamos su pronta refrendación e implementación, insistió el comandante guerrillero, quien criticó el desalojo del campamento por la paz levantado en la plaza Bolívar, de esta capital, así como las intimidaciones y homicidios contra activistas sociales y militantes de la plataforma Marcha Patriótica.
No más asesinatos de líderes sindicales, agrarios o populares, de reclamantes de tierras, ni de opositores de izquierda, no más amenazas ni hostilidades, exigió Timochenko, quien manifestó su respeto hacia los adversarios y les pidió trabajar unidos por un mejor país.
Los gobiernos de Venezuela, Ecuador y Francia felicitaron el acuerdo firmado en Colombia.