Gobierno venezolano llama a la oposición a cesar campañas de odio, violencia y desprestigio contra el país
El Gobierno venezolano sentado a la mesa de diálogo con la oposición prioriza el cese del odio, la violencia y las campañas de desprestigio contra Venezuela.
Este sábado inició la tercera reunión entre los representantes del Gobierno de Venezuela y de la oposición, con el acompañamiento del Vaticano y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), en el marco de la nueva ronda de contactos.
En la cita, el Ejecutivo presentó varias consideraciones sobre los puntos que deben ser abordados en las conversaciones.
La delegación gubernamental señaló como necesaria la discusión franca sobre el cese del intervencionismo y el respeto de la soberanía nacional y del Estado de derecho.
Insistió en que deben ser los grandes temas, aquellos que conciernen a nuestras mujeres y hombres, que aspiran de los factores políticos que se alejen del cálculo y la retórica mezquina y promuevan acuerdos para el bien común.
El documento también mencionó otros temas de gran importancia para el diálogo, como pueden ser el cese del odio y de la violencia psicológica, racial, política y criminal y de las campañas de odio entre compatriotas, así como el cese de la guerra económica impuesta a Venezuela por medio del bloqueo económico, financiero y comercial.
El Gobierno reiteró la necesidad de cesar las campañas de desprestigio contra Venezuela, las que calificó como una estrategia articulada con centros internacionales.
Además, el texto hizo referencia a la actitud y el planteamiento violento de la derecha venezolana que, con la ayuda de la Asamblea Nacional (AN), de mayoría opositora, pretende derrocar al presidente Maduro.
El informe gubernamental recordó a la oposición que tras la llegada del fallecido presidente Hugo Chávez, allá en 1999, Venezuela inició de manera pacífica una intensa transformación social, política y económica jamás conocida por el país en 170 años.
El escrito lamenta que actualmente la más intransigente oposición de las élites, que ostentaron el poder por más de 100 años en el país sudamericano, hayan abierto un proceso brutal de erradicación de la Revolución chavista en Venezuela.
En la cita, el Ejecutivo presentó varias consideraciones sobre los puntos que deben ser abordados en las conversaciones.
La delegación gubernamental señaló como necesaria la discusión franca sobre el cese del intervencionismo y el respeto de la soberanía nacional y del Estado de derecho.
Insistió en que deben ser los grandes temas, aquellos que conciernen a nuestras mujeres y hombres, que aspiran de los factores políticos que se alejen del cálculo y la retórica mezquina y promuevan acuerdos para el bien común.
El documento también mencionó otros temas de gran importancia para el diálogo, como pueden ser el cese del odio y de la violencia psicológica, racial, política y criminal y de las campañas de odio entre compatriotas, así como el cese de la guerra económica impuesta a Venezuela por medio del bloqueo económico, financiero y comercial.
El Gobierno reiteró la necesidad de cesar las campañas de desprestigio contra Venezuela, las que calificó como una estrategia articulada con centros internacionales.
Además, el texto hizo referencia a la actitud y el planteamiento violento de la derecha venezolana que, con la ayuda de la Asamblea Nacional (AN), de mayoría opositora, pretende derrocar al presidente Maduro.
El informe gubernamental recordó a la oposición que tras la llegada del fallecido presidente Hugo Chávez, allá en 1999, Venezuela inició de manera pacífica una intensa transformación social, política y económica jamás conocida por el país en 170 años.
El escrito lamenta que actualmente la más intransigente oposición de las élites, que ostentaron el poder por más de 100 años en el país sudamericano, hayan abierto un proceso brutal de erradicación de la Revolución chavista en Venezuela.