En su reunión en Teherán con el nigeriano Mohamad Barkindo, secretario general de la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP), Rouhani afirmó que la inestabilidad en el mercado del crudo perjudica tanto a los países productores como a los consumidores.

Advirtió que de un mercado inestable deviene daños medioambientales y por ello urgió a todos los miembros de la OPEP a cooperar para su estabilización.

Rouhani llamó a perseguir un objetivo común en pro de un mercado equilibrado y justo, una meta que, a su juicio, solo es posible con la colaboración de los países miembros del organismo.

Por su parte, el nuevo secretario general de la OPEP confirmó que los países productores del crudo deben impulsar las cooperaciones para resolver los problemas existentes en el mercado mundial del petróleo.

También alabó los grandes logros de Irán en el sector energético y el apoyo del país persa a la independencia y el desarrollo del organismo internacional.

Los países exportadores del petróleo buscan un acuerdo para reducir los niveles de producción con el fin de evitar una nueva caída de los precios mundiales del petróleo.

Irán, que actualmente retoma su cuota de producción al nivel del periodo anterior a las sanciones impuestas en su contra, había acordado hablar sobre el plan de congelación una vez alcanzase la producción deseada. Sin embargo, en la reunión de los países petroleros en Doha Qatar, celebrada en abril, la República Islámica rehusó adherirse a cualquier límite máximo de producción. 

A su vez, Arabia Saudita anunció que congelaría sus niveles de producción de petróleo solo si Irán y otros grandes productores hacían lo mismo.

Irán, que redujo su producción petrolífera por las sanciones en 2012, ha decidido recuperar su estatus como segundo mayor productor de la OPEP.