Pueden reducir condena de expresidente uruguayo de la Conmebol
Un acuerdo entre el expresidente de la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol) Eugenio Figueredo y la Fiscalía uruguaya determinará que la sentencia del exdirigente se fije en menos de seis años, divulgaron medios periodísticos.

El también exvicepresidente de la FIFA fue arrestado en Suiza y extraditado a Uruguay el 24 de diciembre pasado tras ser reclamado por la justicia nacional, acusado por los delitos de estafa y lavado de activos.
Desde entonces permanece encerrado en una cárcel sin que se le concediera prisión domiciliaria.
La semana pasada Figueredo, de 83 años, convenió con el fiscal del caso un acuerdo en el que entregó propiedades valuadas en 10 millones de dólares y aportó datos sobre otras personas vinculadas a las maniobras de lavado de activos por una reducción de la pena, publicó El Observador.
El código penal uruguayo establece para esos delitos penas de dos a 15 años de prisión, sin embargo, la defensa puede ampararse en la posibilidad de prisión domiciliaria prevista por la legislación local para mayores de 70 años.
La víspera el fiscal especializado en crimen organizado Juan Gómez, que atendía el caso, pasó a una sede penal ordinaria y asumió por él su colega María de los Ángeles Camiño, según la fuente.
Gómez explicó a la prensa que el arreglo con Figueredo "no es un acuerdo por prisión domiciliaria", y apuntó que "ese es un derecho que tiene la persona y el sistema en algún momento lo considerará".
Fuentes del Ministerio Público declararon a la TV Nacional que la intención de la fiscalía es que Figueredo cumpla el mayor tiempo posible de reclusión, ya sea en la cárcel o en un régimen de prisión domiciliaria.
El también expresidente de la Federación Uruguaya de Fútbol fue detenido en mayo de 2015 en Suiza como parte del escándalo de corrupción que sacudió a la FIFA y en el que más de una decena de altos funcionarios del organismo mundial fueron arrestados.
Su extradición, además de Uruguay, también fue reclamada por Estados Unidos, donde se le acusa de brindar datos falsos en su solicitud de ciudadanía.
Desde entonces permanece encerrado en una cárcel sin que se le concediera prisión domiciliaria.
La semana pasada Figueredo, de 83 años, convenió con el fiscal del caso un acuerdo en el que entregó propiedades valuadas en 10 millones de dólares y aportó datos sobre otras personas vinculadas a las maniobras de lavado de activos por una reducción de la pena, publicó El Observador.
El código penal uruguayo establece para esos delitos penas de dos a 15 años de prisión, sin embargo, la defensa puede ampararse en la posibilidad de prisión domiciliaria prevista por la legislación local para mayores de 70 años.
La víspera el fiscal especializado en crimen organizado Juan Gómez, que atendía el caso, pasó a una sede penal ordinaria y asumió por él su colega María de los Ángeles Camiño, según la fuente.
Gómez explicó a la prensa que el arreglo con Figueredo "no es un acuerdo por prisión domiciliaria", y apuntó que "ese es un derecho que tiene la persona y el sistema en algún momento lo considerará".
Fuentes del Ministerio Público declararon a la TV Nacional que la intención de la fiscalía es que Figueredo cumpla el mayor tiempo posible de reclusión, ya sea en la cárcel o en un régimen de prisión domiciliaria.
El también expresidente de la Federación Uruguaya de Fútbol fue detenido en mayo de 2015 en Suiza como parte del escándalo de corrupción que sacudió a la FIFA y en el que más de una decena de altos funcionarios del organismo mundial fueron arrestados.
Su extradición, además de Uruguay, también fue reclamada por Estados Unidos, donde se le acusa de brindar datos falsos en su solicitud de ciudadanía.