Ingenieros,  activistas de derechos humanos y trabajadores, unidos en los campamentos de entrenamientos; abandonaron sus puestos de trabajo en las dependencias públicas y decidieron tomar las armas.

Un nuevo ejército se está formando en Swaida, es una jornada en la que se  ha mezclado el deseo de los voluntarios en aprender las diferentes técnicas de combate, con la gestión de los entrenadores que percibieron en ellos la eficiencia y el valor para asimilar algo de las ciencias militares, algo que pueda convertirse  en un respaldo real para ellos en su próxima misión de combate.

Los ejercicios se concentraron en operaciones de defensa de las posiciones, así como el avance en los frentes de batalla, son situaciones que posiblemente enfrenten en un futuro.

Muchas tareas esperan a esos graduados, comenzando por los puestos de control donde sustituirán al ejército que se despliega en esos puestos en los diferentes poblados donde se realizaron actos de reconciliación bajo su patrocinio; esto permitiría al ejército concentrar más fuerzas en el frente.    

Los voluntarios han recibido entrenamientos de preparación y capacitación relacionadas con tareas que se encargarán de cumplir en todos los puntos de la provincia, comenzando con las labores de vigilancia, tareas de inspección y la consolidación de las posiciones que son liberadas.

Esta es una de varias promociones que se preparan para captar a más de dos mil jóvenes que decidieron abandonar sus empleos y negocios y cumplir con las tareas que se les encomienda, su objetivo principal es respaldar al ejército sirio en su guerra contra los grupos armados.