Miles de españoles y británicos protestan contra intervención militar de sus gobiernos en Siria
Cerca de 6 mil personas se congregaron en Madrid, España, para protestar contra una eventual intervención de España en el conflicto sirio.

No a la guerra", gritaron los manifestantes convocados a la marcha por la plataforma ciudadana “No en Nuestro Nombre”, que en solo una semana consiguió casi 34 mil simpatizantes en Internet, entre los cuales están las alcaldesas de Madrid y Barcelona.
La dirigente del partido Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, y el alcalde de Cádiz, José María Gonzales Santos, de la formación Por Cádiz Sí Se Puede, filial de Podemos, estuvieron presentes en la protesta.
Los congregados también rechazaron la presencia de bases de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en el territorio español y exigen el fin de los contratos que permiten el despliegue de fuerzas de esa entidad militar en España.
La manifestación se produjo en momentos en que el Gobierno español apoya la posibilidad de que el país autorice una intervención militar en Siria en el marco de la lucha contra el grupo terrorista Daesh, si cuenta con la anuencia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Unión Europea (UE) y del Parlamento español.
A su vez, el canciller español, José Manuel García-Margallo, aseguró que no hay más solución que la militar para acabar con Daesh en Irak, Siria, Libia y Mali.
Por otra parte, unas 4 mil británicos tomaron las calles de Londres, capital británica, en protesta por un proyecto de ley que, de ser aprobado, legalizará la participación de su país en los bombardeos contra el grupo terrorista Daesh en Siria.
Convocados por la Coalición de Parar la Guerra (Stop the War Coalition), ls manifestantes iniciaron la marcha desde la calle Downing Street, donde se encuentra la residencia del primer ministro del Reino Unido, David Cameron.
Los manifestantes portaban pancartas con consignas antibélicas: No bombardeen Siria" y "Los bombardeos no matan una ideología, sino la alimentan".
En declaraciones recogidas por la agencia francesa de noticias AFP, el director de la referida coalición antiguerra, Andrew Murray, pidió a los convocados que respalden a Jeremy Corbyn, líder del opositor Partido Laborista (PL) y exdirigente de la Coalición de Parar la Guerra en su lucha contra posibles bombardeos en Siria.
En una carta enviada a los correligionarios en el Parlamento, Corbyn explicó las razones por las que no debían apoyar el plan para la participación de su país en los bombardeos contra Daesh en Siria.
Ante la división entre los miembros de su partido sobre una eventual votación en el Parlamento, el político británico dijo que se reunirá el lunes con los miembros de su equipo para llegar a un consenso.
El pasado jueves, el primer ministro británico defendió en la Cámara de los Comunes la necesidad de extender a Siria los ataques que el Reino Unido lleva a cabo en Irak desde septiembre de 2014, en el marco de los ataques de la llamada coalición anti-Daesh liderada por Estados Unidos.
La dirigente del partido Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, y el alcalde de Cádiz, José María Gonzales Santos, de la formación Por Cádiz Sí Se Puede, filial de Podemos, estuvieron presentes en la protesta.
Los congregados también rechazaron la presencia de bases de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en el territorio español y exigen el fin de los contratos que permiten el despliegue de fuerzas de esa entidad militar en España.
La manifestación se produjo en momentos en que el Gobierno español apoya la posibilidad de que el país autorice una intervención militar en Siria en el marco de la lucha contra el grupo terrorista Daesh, si cuenta con la anuencia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Unión Europea (UE) y del Parlamento español.
A su vez, el canciller español, José Manuel García-Margallo, aseguró que no hay más solución que la militar para acabar con Daesh en Irak, Siria, Libia y Mali.
Por otra parte, unas 4 mil británicos tomaron las calles de Londres, capital británica, en protesta por un proyecto de ley que, de ser aprobado, legalizará la participación de su país en los bombardeos contra el grupo terrorista Daesh en Siria.
Convocados por la Coalición de Parar la Guerra (Stop the War Coalition), ls manifestantes iniciaron la marcha desde la calle Downing Street, donde se encuentra la residencia del primer ministro del Reino Unido, David Cameron.
Los manifestantes portaban pancartas con consignas antibélicas: No bombardeen Siria" y "Los bombardeos no matan una ideología, sino la alimentan".
En declaraciones recogidas por la agencia francesa de noticias AFP, el director de la referida coalición antiguerra, Andrew Murray, pidió a los convocados que respalden a Jeremy Corbyn, líder del opositor Partido Laborista (PL) y exdirigente de la Coalición de Parar la Guerra en su lucha contra posibles bombardeos en Siria.
En una carta enviada a los correligionarios en el Parlamento, Corbyn explicó las razones por las que no debían apoyar el plan para la participación de su país en los bombardeos contra Daesh en Siria.
Ante la división entre los miembros de su partido sobre una eventual votación en el Parlamento, el político británico dijo que se reunirá el lunes con los miembros de su equipo para llegar a un consenso.
El pasado jueves, el primer ministro británico defendió en la Cámara de los Comunes la necesidad de extender a Siria los ataques que el Reino Unido lleva a cabo en Irak desde septiembre de 2014, en el marco de los ataques de la llamada coalición anti-Daesh liderada por Estados Unidos.