Continúan en Viena las conversaciones entre los cancilleres de Irán y el sexteto internacional para continuar el análisis de los puntos pendientes en las negociaciones nucleares.
El corresponsal de Al Mayadeen informó que las conversaciones tratan sobre el asunto del levantamiento de las sanciones económicas impuestas a Irán. Se trasladó a través de una fuente diplomática iraní participante que Teherán no abordará la cuestión de las sanciones relacionadas con su programa balístico.

Después del encuentro del canciller
iraní Mohammad Javad Zarif con su homólogo ruso Serguei Lavrov, la cancillería
rusa trasladó su llamado a ambos ministros para que lleguen a una solución
rápida y satisfactoria para todas las partes.
Irán y seis potencias mundiales decidieron
hoy extender por otros dos días las negociaciones nucleares en Viena, lo cual
hizo al canciller Mohammad Javad Zarif declinar su asistencia a la cumbre del
BRICS en Rusia.
Fuentes
del ministerio de Relaciones Exteriores señalaron que Zarif se excusó de viajar
a la ciudad rusa de Ufa, donde mañana inicia la séptima reunión de jefes de
Estado de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
La
mencionada urbe acogerá, además, los días 9 y 10 del corriente mes la cumbre de
la Organización de Cooperación de Shanghai, mecanismo integrado por Russia,
China, Kazajstán, Kirguistán, Tayikistán y Uzbekistán, y en el que Mongolia, India,
Pakistán, Irán y Afganistán tienen estatus de observador.
El
titular de Exteriores hizo el anuncio en la capital austríaca tras reunirse con
su par chino, Wang Yi, y explicar que es indispensable su presencia allí para
acelerar las últimas horas que se suspone restan para sellar un pacto global y
definitivo con el Grupo 5+1.
Zarif,
quien debía regresar a Teherán para unirse a la comitiva del presidente Hassan
Rouhani, sostuvo hoy reuniones intensas en el hotel vienés sede de las
tratativas con los ministros de Exteriores o sus representantes de Estados
Unidos, Rusia, Francia, Gran Bretaña y China más Alemania (G5+1).
Los
contactos, a los que asistió también la jefa de Política Exterior de la Unión
Eurorpea (UE), Federica Mogherini, se enfocaron en completar el texto del
acuerdo final y global, así como los numerosos anexos que siguen con asteriscos
pendientes de consensuar, según fuentes diplomáticas.
Las
partes reconocieron la urgencia de eliminar desacuerdos, en particular los
relativos la eliminación de las sanciones económicas de Occidente, que Irán
desea sea completa y simultánea a la entrada en vigor del arreglo.
Igualmente,
las potencias occidentales del G5+1 siguen presionando a la nación persa para
que permita a inspectores extranjeros visitar instalaciones militares iraníes y
entrevistar a científicos nucleares del país.
Zarif
y Mogherini admitieron que los desacuerdos son serios, pero mostraron voluntad
de “borrar los paréntesis” (del texto final y los anexos), y anunciaron que las
pláticas seguirán al menos dos días más después de este 7 de julio, el último
plazo fijado tras agotar el anterior del 30 de junio.
La
jefa de la diplomacia de la UE aclaró que el aplazamiento no significa una
extensión, dado que algunos ministros deben partir –o ya lo hicieron-, aunque
el diálogo se halla en la que describió como “la etapa más dura porque se
abordan los temas más difíciles”.
La
fase actual será complicada y desafiante para ambas partes, apuntó al indicar
que, pese a las dificultades el acuerdo es factible y los negociadores intentan
ser flexibles tras haber logrado crear el contexto parar el pacto.
Por
su lado, el presidente del parlamento de Irán, Alí Larijani, afirmó hoy que un
buen acuerdo nuclear con el G5+1 servirá a los intereses de los siete países
implicados y también de todo el mundo.