Líbano: Partidos patrióticos de izquierda en la línea de fuego en el enfrentamiento a los grupos takfiristas terroristas.
Se
incrementan las preocupaciones de las familias de los pueblos libaneses de la
Bekaa Norte ante la posibilidad de penetración de los grupos armados desde las
montañas áridas, y en especial los hombres de la Organización Daesh. Por ello,
apoyan al ejército en las operaciones de exploración y observación.
Los
comunistas del Líbano están presentes también en la línea de fuego y
participan en el enfrentamiento a los grupos takfiristas. El hecho no es
nuevo. Pues el Partido Comunista ya antes participó en el enfrentamiento a la
ocupación israelí. Hoy el peligro amenaza a los pueblos de la Bekaa del
Norte, luego de la expansión de los grupos armados en las montañas áridas
colindantes con los pueblos de Al Qaa, Raas Baalbak hasta Al Labwa.
La decisión del Partido comunista se tomó a raíz de la solicitud presentada por sus militantes. Entonces se congregaron como combatientes cerca de las montañas áridas de Raas Baalbak para proteger a las familias de la aldea.
Abu Talal, ex dirigente del Partido Comunista, plantea que el Partido adoptó la decisión de enfrentar a los takfiristas como se enfrentó al enemigo sionista, porque los consideramos a ambos como una sola entidad, y ésta aun más peligrosa, sobre todo por las secuelas que dejan en cada lugar que controlan.
Los combatientes comunistas confirman la decisión de enfrentar a Daesh y a otras organizaciones takfiristas. Ziad es uno de ellos y aclara que su misión se limita a la exploración y a la observación y que se lleva a cabo la coordinación con las fuerzas de seguridad y con la Resistencia en el terreno, en caso de observarse cualquier movimiento sospechoso.
Las familias de Raas Baalbak se sienten más seguras después que se han concentrado el ejército libanés y la Resistencia en las líneas del enfrentamiento y los partidos patrióticos en las líneas de la retaguardia cercanas a su pueblo.
Rifaat Nasrallah, el responsable en el terreno de las brigadas de la Resistencia libanesa, aclara que nadie actúa espontáneamente, sino que existe una coordinación entre todos, y no es real lo que plantean algunos sobre que el ejército está ausente. Aseguró que todas las familias de la región respaldan al ejército.
El Partido Comunista es capaz de movilizar, pero no grandes cantidades. Su Dirección no sobredimensiona sus posibilidades y se rige por el principio de que cada cual aporte de acuerdo a su capacidad.
Algunos partidos patrióticos respondieron al llamamiento asumiendo el deber de defender los pueblos de la Bekaa del Norte. Entonces sus efectivos portaron las armas, a pesar de las modestas posibilidades, para enfrentar el peligro que emana de los grupos armados concentrados en las colinas desde las cuales se divisan sus regiones.
La decisión del Partido comunista se tomó a raíz de la solicitud presentada por sus militantes. Entonces se congregaron como combatientes cerca de las montañas áridas de Raas Baalbak para proteger a las familias de la aldea.
Abu Talal, ex dirigente del Partido Comunista, plantea que el Partido adoptó la decisión de enfrentar a los takfiristas como se enfrentó al enemigo sionista, porque los consideramos a ambos como una sola entidad, y ésta aun más peligrosa, sobre todo por las secuelas que dejan en cada lugar que controlan.
Los combatientes comunistas confirman la decisión de enfrentar a Daesh y a otras organizaciones takfiristas. Ziad es uno de ellos y aclara que su misión se limita a la exploración y a la observación y que se lleva a cabo la coordinación con las fuerzas de seguridad y con la Resistencia en el terreno, en caso de observarse cualquier movimiento sospechoso.
Las familias de Raas Baalbak se sienten más seguras después que se han concentrado el ejército libanés y la Resistencia en las líneas del enfrentamiento y los partidos patrióticos en las líneas de la retaguardia cercanas a su pueblo.
Rifaat Nasrallah, el responsable en el terreno de las brigadas de la Resistencia libanesa, aclara que nadie actúa espontáneamente, sino que existe una coordinación entre todos, y no es real lo que plantean algunos sobre que el ejército está ausente. Aseguró que todas las familias de la región respaldan al ejército.
El Partido Comunista es capaz de movilizar, pero no grandes cantidades. Su Dirección no sobredimensiona sus posibilidades y se rige por el principio de que cada cual aporte de acuerdo a su capacidad.
Algunos partidos patrióticos respondieron al llamamiento asumiendo el deber de defender los pueblos de la Bekaa del Norte. Entonces sus efectivos portaron las armas, a pesar de las modestas posibilidades, para enfrentar el peligro que emana de los grupos armados concentrados en las colinas desde las cuales se divisan sus regiones.