Provoca repulsa condena contra el sheikh Ali Salman, quien exhorta desde prisión a marchar contra el régimen de Al Khalifa
El líder opositor bareiní,
el sheikh Ali Salman, llamó al pueblo a mantener las marchas pacíficas contra
el régimen de Al khalifa y a continuar con sus esfuerzos para conseguir la
aplicación de reformas políticas y el establecimiento de un sistema basado en
la justicia y la ley.

El mensaje
de Salman, emitido desde la cárcel, tiene lugar un día después de que un
tribunal lo condenara el martes a cuatro años de cárcel por incitar al
incumplimiento de la ley, pero le absolvió del cargo de promover un cambio en
el régimen de Al Jalifa.
Desde la detención de Salman, el 28 de diciembre, los bareiníes piden de manera diaria su puesta en libertad.
Por otro lado, activistas bareiníes, informaron sobre el traslado del sheikh Salman a la cárcel de jaw, conocida por las torturas a los prisioneros y la falta de acceso a necesidades básicas.
Según algunas fuentes de organizaciones de derechos humanos, los líderes políticos de la revolución bahreiní encarcelados en ese centro confirman la buena moral y tranquilidad de Salman.
Al-Wefaq, principal partido opositor de Bahrein, tildó de “nula e ilegal” la condena contra su secretario general.
La Organización Europea Bahreiní para Derechos Humanos (EBOHR) considera la sentencia contra Salman como parte de la represión y ataques del régimen bahreiní para amedrentar a los activistas y opositores.
El gobierno de Estados Unidos y la Unión Europea también manifestaron su preocupación por la sentencia declarada contra el líder opositor. Amnistía Internacional (AI) aseguró que la sentencia contra Salman demuestra el sistemático desprecio de las autoridades de Bahrein por el derecho a la libertad de expresión.
Desde la detención de Salman, el 28 de diciembre, los bareiníes piden de manera diaria su puesta en libertad.
Por otro lado, activistas bareiníes, informaron sobre el traslado del sheikh Salman a la cárcel de jaw, conocida por las torturas a los prisioneros y la falta de acceso a necesidades básicas.
Según algunas fuentes de organizaciones de derechos humanos, los líderes políticos de la revolución bahreiní encarcelados en ese centro confirman la buena moral y tranquilidad de Salman.
Al-Wefaq, principal partido opositor de Bahrein, tildó de “nula e ilegal” la condena contra su secretario general.
La Organización Europea Bahreiní para Derechos Humanos (EBOHR) considera la sentencia contra Salman como parte de la represión y ataques del régimen bahreiní para amedrentar a los activistas y opositores.
El gobierno de Estados Unidos y la Unión Europea también manifestaron su preocupación por la sentencia declarada contra el líder opositor. Amnistía Internacional (AI) aseguró que la sentencia contra Salman demuestra el sistemático desprecio de las autoridades de Bahrein por el derecho a la libertad de expresión.