El Club de las Jóvenes Palestinas
Este proyecto evoca el sabor y la originalidad de los bordados palestinos frente a los fallidos intentos de la ocupación israelí por atribuirse una herencia cultural que no es suya.
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El Club de las Jóvenes Palestinas
Desde el siglo pasado, la emigración ha alejado a muchos palestinos de su patria. Aun así, este pueblo se mantiene unido en pos de preservar su patrimonio nacional.
Por eso, desde diversos países, los palestinos establecieron centros para dar continuidad a la herencia cultural de sus padres y abuelos.
Uno de los proyectos más destacados es el Club de las Jóvenes Palestinas en Siria, que se especializa en los tejidos tradicionales.
Club de las jóvenes Palestinas
El Club se estableció en Damasco en 1965, con el objetivo de preservar la identidad desde la diáspora y establecer un centro en la capital siria, que recibió a miles de refugiados después de la Nakba.
Muchas personas eligieron el campamento Yarmouk, en el sur de Damasco, para fundar la institución, pues era el sitio de reunión más grande de palestinos en Siria. Como resultado de la guerra, el centro se trasladó al barrio de Mezzeh y luego a la calle Al-Malik Al-Adel.
Actualmente, el centro capacita, rehabilita y entrena a chicas para emprender carreras que las apoyen económicamente a ellas y a sus familias, además de proteger y defender el patrimonio palestino.
Las principiantes se entrenan para completar pequeñas piezas con dibujos simples, hasta que dominan la transición de un cuadrado a otro (del mismo tamaño y precisión) y, después de tres meses de trabajo, son capaces de lograr formas de dificultad gradual.
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El Club de las Jóvenes Palestinas -
El Club de las Jóvenes Palestinas
El Club incluye secciones dedicadas a la costura y el bordado, y una sala de formación para realizar cursos de calificación para niñas.
También existe una sala de exposición permanente destinada a la comercialización y venta de productos que adornan las paredes del salón y llenan sus rincones con vestidos y chales en los que predomina el color púrpura cananeo.
De esta forma, reflejan el sabor y la originalidad de la herencia palestina en un molde elegante y renovado que sigue el ritmo de los tiempos actuales y está en línea con todos los gustos árabes y no árabes.
Productos del Club de las Jóvenes Palestinas
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El Club de las Jóvenes Palestinas
Por el Club han pasado miles de mujeres palestinas y sirias, decididas a preservar el legado de sus padres y abuelos, pues ellas conocen la importancia del aspecto cultural en la batalla por preservar la identidad.
Cerca de 300 mujeres cooperan desde sus casas y hacen piezas basadas con la puntada palestina. Completar un vestido, por ejemplo, les toma entre uno y dos meses.
Las chicas dominan varias puntadas con los hilos y colores utilizados en las diferentes ciudades palestinas. Así, los vestidos de las zonas costeras se distinguen por la mezcla griega.
En cambio, las prendas de la ciudad Naplusa se relacionan con los textiles damasquinados como consecuencia de los vínculos comerciales que existieron entre ambas ciudades. Mientras, los vestidos de la ciudad Jaffa se caracterizan por la abundancia de colores debido al entorno lleno de árboles y pájaros.
Todas las muchachas también producen textiles con formas y dibujos inspirados en la naturaleza, incluidas estrellas, flores, cruces y otras formas que se transforman en pinturas artísticas.
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El Club de las Jóvenes Palestinas
Enfrentar el robo de la ocupación israelí
El Club de las Jóvenes Palestinas lucha contra los intentos de la ocupación israelí por robar el patrimonio palestino y atribuírselo.
Los procesos de imitar vestidos y saquear la identidad palestina continúan. De hecho, hace tan solo un año “Israel” organizó un desfile de reinas de belleza con vestidos palestinos.
Sin embargo, las chicas del Club demuestran que su pueblo puede desafiar al mundo con la vestimenta que se tejió y nació antes de la ocupación sionista. El patrimonio es una identidad fija y así lo confirmó la Unesco, que adoptó la vestimenta palestina y la incluyó como Patrimonio Mundial.
Estas muchachas evocan un mensaje: “seguimos vivas y seguimos preservando nuestra identidad, ya sea a través del hilo y la aguja, ya sea a través de la palabra o a través del dibujo y el arte, nuestra identidad no será dispersada, ni será desgarrada, somos Palestina".
