Condenado al fracaso plan de coalición antiiraní en el golfo Pérsico, advierte oficial del CGRI
“El enemigo debería saber que no puede hacer nada. Como coaliciones anteriores, esta también será una ruina y no podrá materializarse”, afirmó el vicepresidente para Asuntos Políticos del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el general Yadolá Javani.

El vicepresidente para Asuntos Políticos del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el general Yadolá Javani, aseguró que el plan de EE.UU. para formar una coalición antiraní en el golfo Pérsico está condenado al fracaso.
“El enemigo debería saber que no puede hacer nada. Como coaliciones anteriores, esta también será una ruina y no podrá materializarse”, afirmó el alto oficial iraní.
De igual modo, tachó de “autodestructiva” y “contraproducente” la iniciativa estadounidense y recalcó que la seguridad reinante en la región es resultado de labor de las Fuerzas Armadas iraníes.
“Si eligen cometer un error algún día, toda la región caerá sobre sus cabezas”, advirtió al considerar que en su criterio Washington no tiene planes serios para atacar a Irán.
Javani comentó sobre el derribo reciente de un avión no tripulado del Pentágono que culminó con un período de crecientes tensiones entre Estados Unidos e Irán sobre la “política de presión máxima” del presidente Donald Trump.
Según Javani, si el dron estadounidense lo hubiese derribado un avanzado sistema de defensa aérea S-300 o S-400 de fabricación rusa, no lo podría ser calificado como “una fuente de orgullo”, se lee en el informe de Fars.
“Pero esta obra maestra de la tecnología estadounidense, que tiene fama de evadir el radar y ser sigilosa en acción, fue perseguida por un sistema de defensa de producción local (iraní) denominado Khordad-3”, indicó.
En línea con su política de “máxima presión” contra Teherán, y en un intento para reducir a cero las exportaciones iraníes del crudo, Washington anunció en julio pasado su decisión de crear una coalición que vigile las vías fluviales en el estrecho de Ormuz, en el golfo Pérsico, y pidió apoyo a sus aliados para materializar su propuesta antiiraní.
No obstante, incluso los aliados de Washington son reacios a la medida. Fuentes diplomáticas de Francia y Reino Unido, citadas anónimamente por la agencia británica de noticias Reuters, expresaron la preocupación de París y Londres ante la idea “contraproducente” de EE.UU., mientras aseguraban que no es viable escoltar a todos los buques comerciales en el estrecho de Ormuz, tal y como piden los estadounidenses.
El ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas, expresó el rechazo de Berlín a la iniciativa estadounidense, y aseguró que Alemania no participará en la misión, pues no considera que la opción militar pueda ser una solución para las tensiones actuales en el Golfo Pérsico.
La India y Japón manifestaron también que no se sumarán a tal coalición en el Golfo Pérsico. El jefe de gabinete nipón, Yoshihide Suga, aclaró que Tokio no está considerando enviar sus fuerzas militares para la coalición marítima propuesta por EE.UU. y advirtió de que esta iniciativa puede provocar una escalada de tensión en la región.
Mientras, el líder de la Revolución Islámica, el ayatollah Sayyed Ali Khamenei, aseguró que Washington no podrá derrotar ni política ni militarmente a Irán, incluso aunque cuente con la ayuda de sus múltiples aliados.