Arabia Saudita impide a palestinos refugiados en El Líbano realizar la peregrinación del Hajj
La semana pasada, la embajada saudita llamó a los jefes de las compañías de viajes del Hajj en El Líbano y devolvió los documentos de los refugiados palestinos de Siria sin visas de peregrinación, a pesar de haber dado su aprobación inicial.
Millones de musulmanes están acudiendo en masa a la ciudad sagrada de La Meca para la peregrinación del Hajj, una piedra angular de la fe islámica que comienza el viernes; sin embargo, alrededor de 70 refugiados palestinos en El Líbano, la mayoría de los cuales tienen más de 70 años, fueron informados por las autoridades la semana pasada de que no se les otorgarían visas cumlir con esa tradición.
En la religión islámica, el Hajj es la peregrinación que una vez al año realizan los musulmanes de todo el mundo a La Meca (ciudad natal del profeta Mahoma), en Arabia Saudita, y que para los seguidores de esa fe es un acto que debe hacer al menos una vez en su vida.
Los palestinos rechazados son refugiados por partida doble. Son descendientes de palestinos expulsados de sus hogares durante la creación de (Israel) en 1948, y ahora se han establecido en El Líbano después de huir del conflicto sirio en 2012, aunque poseen documentos de viaje emitidos por Damasco, no tienen la ciudadanía de ningún país.
El año pasado, Middle East Eye (MEE) informó sobre una ola de restricciones de visa saudita que afectó a un total de tres millones de palestinos en (Israel), Jerusalén Este, Jordania y El Líbano, impidiéndoles realizar las peregrinaciones de Hajj y Umrah.
Estas limitaciones finalmente se levantaron en febrero, después de cinco meses de negociaciones exhaustivas con las autoridades sauditas, pero para los refugiados palestinos de Siria que en la actualidad residen en El Líbano, las restricciones siguen vigentes.
La semana anterior, la embajada saudita llamó a los jefes de las compañías de viajes del Hajj en El Líbano y devolvió los documentos de los refugiados palestinos de Siria sin visas de peregrinación, a pesar de haber dado su aprobación inicial.
“Esto fue doloroso para mi madre y mi padre, que tienen más de 70 años”, dijo un pariente de dos palestinos a MEE.
“Se prepararon y esperaban viajar. Todo lo que mis padres quieren es peregrinar antes de que sus vidas terminen; quedaron devastados por la decisión 10 días antes de que comenzase el Hajj”, expresó otro, aunque todos hablaron en condición de anonimato por si la decisión saudita fuera revocada en el futuro.
Para solicitar su visa para el Hajj, los padres de los palestinos tuvieron que obtener nuevos documentos de viaje sirios, que costaron 350 dólares cada uno y tardaron 20 días en procesarse, más las tarifas de registro de agencias de viajes. A modo de comparación, renovar un pasaporte británico cuesta alrededor de 100 dólares.
También viajaron a la embajada de Arabia Saudita en Beirut para obtener su información biométrica para la visa, y recibieron las vacunas necesarias para ser admitidos para la peregrinación.
Se estima que alrededor de 27 mil refugiados palestinos de Siria residen actualmente en El Líbano, y solo 100 de ellos viajaron a Arabia Saudita el año pasado para realizar el Hajj, según Action Group.
El 2018, alrededor de mil 500 refugiados palestinos de El Líbano se embarcaron en el Hajj, de una comunidad de 174 mil 422, según el primer y único censo de la comunidad del país.
Los palestinos registrados en territorio libanés también se enfrentan a fuertes restricciones y marginación, y están limitados a solo un puñado de profesiones de mano de obra.