El primer ministro de la Federación de Rusia, Dimitri Medvedev, llegó hoy a Cuba para realizar una visita oficial, y fue recibido por el canciller Bruno Rodríguez.

El jefe de Gobierno ruso rendirá tributo al Héroe Nacional, José Martí, en la Plaza de la Revolución capitalina, y será recibido en ceremonia solemne en el Palacio de la Revolución (sede del Ejecutivo) por las máximas autoridades de la isla.

De acuerdo con la agenda divulgada por el gabinete ruso en su página web, se prevé que ambas naciones firmen acuerdos intergubernamentales e interinstitucionales, así como contratos comerciales.

Durante se estancia en La Habana, el primer ministro recibirá el título Honoris Causa en Ciencias Políticas de la Universidad de La Habana, y realizará otras actividades.

 

Cuba y Rusia mantienen estrechas relaciones de amistad y cooperación, incluido el diálogo político sobre temas de la agenda internacional, e impulsan proyectos económicos en sectores estratégicos como el energético, el industrial y de transporte, entre otras ramas. Esos vínculos se manifiestan también en el permanente intercambio de visitas de alto nivel.

La nación euroasiática ha expresado reiteradamente su firme posición contra bloqueo económico, financiero y comercial impuesto por Estados Unidos.

A su vez, Cuba se opone a cualquier política de aplicación de sanciones, particularmente a aquellas que se adoptan contra el pueblo y el gobierno rusos.

En un encuentro efectuado en La Habana a finales de julio pasado, del canciller ruso, Serguei Lavrov, y el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, destacaron la alta coincidencia en la visión de las dos naciones hacia los diferentes temas de la agenda internacional.

 

Ambos dirigentes expresaron la voluntad de trabajar por el continuo fortalecimiento de los vínculos bilaterales, lo cual fue refrendado recientemente en Moscú en la celebración de la comisión mixta intergubernamental.

La mayor de las Antillas estableció relaciones diplomáticas en 1942 con la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, que luego fueron interrumpidas en 1952, hasta que el Gobierno revolucionario reanudó los vínculos el 8 de mayo de 1960.