Cúpula golpista de Bolivia recibió entrenamiento en Escuela de las Américas
Dentro de la policía boliviana, los principales comandantes que ayudaron a lanzar el golpe han pasado por el programa de intercambio policial APALA, diseñado para construir relaciones entre las autoridades estadounidenses y los oficiales de esos cuerpos en los estados latinoamericanos.
Al menos seis de los conspiradores del golpe de Estado que forzó la renuncia del presidente constitucional de Bolivia, Evo Morales, eran exalumnos de la tristemente célebre Escuela de las Américas, una dependencia del Ejército estadounidense, conocida hoy como Instituto del Hemisferio Occidental para la Cooperación en Seguridad.
Dentro de la policía boliviana, los principales comandantes que ayudaron a lanzar el golpe han pasado por el programa de intercambio policial APALA, diseñado para construir relaciones entre las autoridades estadounidenses y los oficiales de esos cuerpos en los estados latinoamericanos.
A pesar de su influencia, o tal vez por ello, el programa mantiene poca presencia pública, revela un artículo publicado en la página digital The Gray Zone.
El fallecido exagete de la CIA Phillip Agee denunció en un libro cómo la inteligencia de los Estados Unidos se basaba tradicionalmente en el reclutamiento de oficiales militares y policiales extranjeros, incluidos los agregados de embajadas, como activos fundamentales para el cambio de régimen y las operaciones de contrainsurgencia.
En Bolivia, el papel de los oficiales militares y policiales entrenados por los Estados Unidos fue fundamental para forzar ese "cambio de régimen".
Las agencias del gobierno de los Estados Unidos, como la USAID, han financiado abiertamente a grupos anti-Morales durante muchos años.
Pero la forma en que las fuerzas de seguridad fueron utilizadas como Caballo de Troya por los servicios de inteligencia de los EE.UU. es menos conocida. Sin embargo, tras el golpe de Estado se hizo imposible negar cuán crítico era este factor, subrayó el texto periodístico.
Consideró el articulista que el complot golpista no podría haber tenido éxito sin la aprobación entusiasta de los comandantes militares y policiales del país. Y su consentimiento fue fuertemente influenciado por los Estados Unidos, donde muchos fueron preparados y educados para la insurrección.
Audios filtrados después de los sucesos del 10 de noviembre, muestran que el exalcalde de Cochabamba y excandidato presidencial Manfred Reyes Villa desempeñó un papel central en la trama.
Reyes resulta ser un exalumno de WHINSEC (la Escuela de las Américas) que actualmente reside en los Estados Unidos.
Los otros cuatro que se presentan o dan su nombre en el audio filtrado son el general Remberto Siles Vasquez ; coronel Julio César Maldonado Leoni; coronel Oscar Pacello Aguirre y coronel Teobaldo Cardozo Guevara. Los cuatro militares asistieron a la Escuela de las Américas.
Cardozo Guevara, en particular, se jacta de sus conexiones entre oficiales activos.
Las identidades de estas personas se confirman mediante la verificación cruzada de los datos de las listas de alumnos de las Escuelas de las Américas con Facebook y artículos de noticias locales bolivianos, además de los audios filtrados.
La Escuela de las Américas es un sitio notorio de educación para los golpistas latinoamericanos que se remonta a la Guerra Fría.
Los graduados han llevado a cabo brutales cambios de régimen y represalias de Haití a Honduras, y algunas de las juntas que más manchas de sangre en la historia de la región han sido dirigidas por exalumnos.
Durante muchos años, los manifestantes contra la guerra han organizado una vigilia de protesta frente a la sede de la Escuela en la base militar de Fort Benning, cerca de Columbus, Georgia.