El lobby de (Israel) en Canadá
Los liberales han imitado la posición del conservador Stephen Harper en relación con las resoluciones de la Asamblea General, que no son más que actos simbólicos de solidaridad con los palestinos.
El gobierno del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, ha hecho una agresiva campaña para conseguir un asiento en el Consejo de Seguridad, pero su intento de ganar un lugar en el órgano de toma de decisiones más poderoso de la ONU se verá obstaculizado por el récord de sus votos decididamente anti-palestinos.
A pesar de afirmar que apoya el "orden basado en reglas internacionales", el gobierno de Trudeau ha votado en contra de más de 50 resoluciones que defienden los derechos de los palestinos, explica el artículo El lobby de (Israel) en Canadá, publicado en la página del periodista Yves Engler.
Los liberales han imitado la posición del conservador Stephen Harper en relación con las resoluciones de la Asamblea General. El lobby israelí en Canadá recauda más de 100 millones de dólares anuales y tienen unos mil millones de dólares en activos.
El brazo de presión de la UJA/CJA, el Centro para (Israel) y Asuntos Judíos, tiene más de 40 empleados y un presupuesto de 10 millones de dólares. Además, B'nai B'rith tiene un grupo de oficinas en todo el país.
Por su parte, el presupuesto del Centro Amigos de Simon Wiesenthal de Canadá es de siete a 10 millones de dólares anuales. Estos grupos trabajan en estrecha colaboración con StandWithUs Canada, CAMERA, Honest Reporting Canada y otras organizaciones políticas nacionalistas israelíes (a menudo de extrema derecha).
Docenas de organizaciones benéficas canadienses registradas, desde el Fondo Nacional Judío hasta Cristianos Unidos por (Israel), también participan en al menos algunas campañas pro israelíes.
Desde 2013 el principal recaudador de fondos para los Liberales de Trudeau ha sido Stephen Bronfman, vástago de una arcaica familia nacionalista israelí. Bronfman ha invertido millones en empresas tecnológicas israelíes y a lo largo de los años el clan Bronfman ha conseguido armas para las fuerzas israelíes y ha apoyado a su ejército de otras maneras.
Otros notables magnates canadienses tienen largas historias de asegurar los lazos entre (Israel) y Canadá.
Con un valor de más de tres mil millones de dólares antes de su muerte, David Azrieli estaba entre los canadienses más ricos. En su juventud sirvió en el grupo paramilitar Haganah durante la guerra de 1948. Su unidad fue responsable de la Batalla de Jerusalén, incluyendo el desplazamiento forzoso de 10 mil palestinos.
Azrieli también fue un promotor inmobiliario en (Israel) y en 2011 hizo una controvertida donación a Im Tirtzu, una organización nacionalista israelí de línea dura (considerada un grupo "fascista" por un tribunal sionista).
Con un valor de mil 600 millones de dólares, Gerald Schwartz y su esposa Heather Reisman crearon la Fundación Heseg para Soldados Solitarios, que proporciona millones de dólares anuales para los no israelíes que luchan en las FDI.
En los últimos años el multimillonario canadiense-israelí Sylvan Adams ha invertido decenas de millones de dólares en diversas iniciativas deportivas y culturales para cambiar la imagen de (Israel).
Otros multimillonarios canadienses, Larry Tanenbaum, Mark Scheinberg, David Cheriton, Daryl Katz, Seymour Schulich, así como las familias Zekelman, Reichmann y Sherman, apoyan a (Israel).
La influencia de CIJA, B'nai B'rith, Bronfman, Schwartz, etc. explica en gran medida el historial de voto antipalestino del gobierno de Trudeau en la ONU. Si eso frustrará la candidatura de Canadá para un puesto en el Consejo de Seguridad está por determinarse.