Al menos 34 refugiados entre los fallecidos durante explosión en Beirut, dice Acnur
El lunes, el primer ministro libanés, Hassan Diab, quien llevaba apenas siete meses en el cargo, renunció junto con su gabinete, calificando la catástrofe de resultado de una corrupción endémica.
Al menos 34 refugiados se encuentran entre las alrededor de 200 personas que murieron en la explosión masiva de un puerto que devastó Beirut, la capital de El Líbano hace una semana, informó la Acnur.
La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) dijo que investiga el presunto reporte de fallecidos.
Hay más de 884 mil refugiados sirios registrados que viven en el Líbano, muchos de los cuales huyen de la actual guerra terrorista imouesta al país vecino, que comenzó en 2011, recordó la Acnur.
Si se tiene en cuenta a los refugiados no registrados, esa cifra es de alrededor de 1,5 millones, según los grupos de ayuda.
El pasado 4 de agosto unas dos mil 750 toneladas de nitrato de amonio, que habían sido almacenadas en el único puerto de Beirut durante seis años, se incendiaron, causando una devastadora explosión que destruyó propiedades a varios kilómetros de distancia.
Más allá del creciente número de muertos, la explosión hirió a más de seis mil personas y dejó a unas 300 mil sin hogar.
La Agencia expresó que su respuesta humanitaria inmediata abarca "toda la comunidad", incluidos los ciudadanos libaneses, los refugiados y los trabajadores migrantes.
Además señaló que sus primeras estimaciones indican que hasta diez mil "hogares vulnerables" se han visto gravemente afectados y necesitan apoyo urgente.
El desastre también ha desencadenado una nueva serie de protestas en el país, con muchos residentes ya en un punto de inflexión por la prolongada crisis económica, la corrupción y la disfunción y el despilfarro gubernamental.
El lunes, el primer ministro libanés, Hassan Diab, quien llevaba apenas siete meses en el cargo, renunció junto con su gabinete, calificando la catástrofe de resultado de una corrupción endémica.
Quedan muchas preguntas sobre por qué el cargamento de nitrato de amonio atracó en Beirut a finales de 2013. Aún más cuestionable es por qué se permitió que un alijo tan grande de material peligroso, utilizado en bombas y fertilizantes, permaneciera allí durante tanto tiempo.
El martes, la agencia de noticias Reuters, citando a un alto funcionario de seguridad, informó que una investigación judicial en enero había concluido que los químicos peligrosos debían ser asegurados inmediatamente.
A su vez, el funcionario dijo a la agencia de noticias que el Presidente Michel Aoun y Diab habían sido notificados en una carta del posible peligro.
Un portavoz de Diab confirmó que había recibido la carta el 20 de julio y la envió al Consejo Supremo de Defensa para su asesoramiento.
La carta había seguido a una serie de memorandos y cartas enviados a los tribunales del país durante los seis años anteriores por funcionarios de puertos, aduanas y seguridad, instando repetidamente a los jueces a ordenar la retirada del nitrato de amonio de su posición tan cercana al centro de la ciudad, informó la agencia de noticias.