Bachelet advierte sobre violencia y criminalidad en áreas bajo control turco en Siria
La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, resaltó que la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas investigó dentro del periodo del 1 de enero al 14 de septiembre de 2020, la muerte de al menos 116 civiles como consecuencia de los artefactos explosivos improvisados utilizados por desconocidos y restos explosivos de guerra.
La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, advirtió sobre la situación de los derechos humanos en partes del norte, noroeste y noreste de Siria controladas por fuerzas turcas y grupos armados afiliados a Turquía, donde se extiende la violencia y el crimen.
Señaló que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha notado un patrón perturbador en los últimos meses de violaciones graves en estas áreas: Afrin, Ras al-Ain y Tal Abyad, donde los asesinatos han aumentado y se han documentado secuestros, traslados ilegales de personas y confiscaciones de tierras y propiedades, además de desalojos forzosos".
Entre las víctimas hay personas consideradas "aliadas con partidos de la oposición o que critican las acciones de grupos armados afiliados a Turquía", según la Comisión de Derechos Humanos.
Las víctimas también incluyen personas consideradas lo suficientemente ricas como para pagar las demandas de rescate. Además, se ha registrado un aumento de las luchas internas entre varios grupos armados afiliados a Turquía por el reparto del poder, con poca preocupación por la seguridad de la población local, donde tales acciones siguen causando víctimas y perjudican la infraestructura civil", agregó.
Resaltó que la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas investigó dentro del periodo del 1 de enero al 14 de septiembre de 2020, la muerte de al menos 116 civiles como consecuencia de los artefactos explosivos improvisados utilizados por desconocidos y restos explosivos de guerra.
Entre los muertos había 15 mujeres, 20 niños y dos niñas, aproximadamente 463 civiles resultaron heridos.
Según la comisión, los grupos armados afiliados a Turquía se han apoderado y saqueado casas, tierras y otras propiedades privadas y comerciales de personas sin ninguna necesidad militar aparente y han ocupado a muchas de ellas con sus familias.
La Oficina de Derechos Humanos de la ONU también ha documentado el secuestro y desaparición de civiles, incluidos mujeres y niños, entre otras graves violaciones de derechos humanos.
Agregó que se desconoce el destino de algunos de estos detenidos y secuestrados.
"El desprecio flagrante por la seguridad de los civiles es incompatible con el derecho de los derechos humanos y las obligaciones del derecho internacional humanitario, que todas las partes, incluidos los grupos armados y quienes ejercen el control, deben respetar", dijo Bachelet.
Asimismo, pidió a las autoridades turcas que respeten el derecho internacional y garanticen el cese de las violaciones cometidas por los grupos armados bajo control turco efectivo.
Señaló que "las personas que viven en estas zonas, cuyos derechos han sido violados, deben ser protegidos e indemnizados".
En este sentido, Bachelet instó a Turquía a "iniciar de inmediato una investigación justa, transparente e independiente sobre los incidentes ocurridos".
Y añadió: "Esto es muy importante. Hemos recibido informes inquietantes de que algunos de los detenidos y secuestrados fueron trasladados a Turquía después de ser detenidos en Siria por grupos armados pro-turcos".
La Alta Comisionada también expresó su continua preocupación por el hecho de que algunas partes del conflicto en Siria estén utilizando servicios básicos como el agua y la electricidad como armas.
Mientras tanto, Bachelet indicó que el derecho internacional prohíbe la destrucción, remoción o "entrega de objetos inútiles" –como instalaciones de agua– que son indispensables para la supervivencia de la población civil.
Por último, pidió a todas las partes que se aseguraran de que los civiles, los bienes de carácter civil y la infraestructura estén protegidos de los ataques y los efectos de las hostilidades.