Piden a canciller brasileño explicación por visita de Pompeo
Algunos parlamentarios consideran la presencia del funcionario norteamericano en suelo brasileño una falta a la soberanía del país.
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El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, y su par brasileño, Ernesto Araújo.
El canciller brasileño tiene que explicar al Senado sobre su reciente encuentro con el secretario de Estado de EE.UU. en una zona fronteriza con Venezuela.
Así lo determinaron los senadores brasileños, durante una sesión semipresencial celebrada el martes, en la que volvieron a criticar la visita, del viernes, del jefe de la Diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, a la ciudad de Boa Vista, capital del estado sureño de Roraima, en la frontera con Venezuela.
Algunos parlamentarios consideran la presencia del funcionario norteamericano en suelo brasileño una falta a la soberanía del país.
“Nuestro canciller se prestó a hacer de mi Roraima, un estado, ya tan sufrido y maltratado, una plataforma para (el presidente de EE.UU., Donald) Trump en este momento de elecciones en Estados Unidos”, fustigó diputado brasileño Telmário Mota.
A su vez, el dirigente del Partido de los Trabajadores (PT, izquierda), Rogério Carvalho, repudió la visita no deseada y “lamentó que el Gobierno brasileño, dirigido por Jair Bolsonaro, demostrara una vez más su sumisión a los dictados del Gobierno de Trump, poniéndose siempre dispuesto a seguir sus órdenes, al recibir a sus representantes en nuestro territorio, en un proceso continuo de afrenta a nuestra soberanía”.
Carvalho también enfatizó que la visita de Pompeo a la zona fronteriza contradice la tradición diplomática de Brasil, que rechaza no solo la agresión a otros países, como Venezuela, sino también el uso de su territorio para atacar a otras naciones vecinas.
La visita del jefe de la Diplomacia norteamericana fue duramente criticada por varias organizaciones sociales y personalidades políticas, e incluso por la Cámara de Diputados.
Al respecto, el expresidente Fernando Henrique Cardoso (1995-2002), junto a otros exministros de Exteriores, en un documento, declaró su condena a la utilización espuria del suelo nacional por parte de un país extranjero como plataforma de provocación de una nación vecina.
