Denuncian complicidad francesa en el envío de armas a Yemen y Libia
Hace dos meses, toda la delegación de eurodiputados franceses del grupo liberal Renew Europe, salvo uno, votó en contra de un mayor control de las exportaciones de armas.
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Casi medio millón de personas en Yemen, en las zonas circundadas de verde, corren el riesgo de que la artillería César, de fabricación francesa, se encuentre en el lado saudita.
La enmienda formaba parte de un informe más amplio sobre armas para hacer cumplir las directrices de toda la UE sobre una industria multimillonaria que suministra armas a países como Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, precisa el informe publicado en el sitio web Euobserver.com.
Conocidas también como la Posición Común de la UE, las directrices son normas legalmente vinculantes para asegurar que personas inocentes no mueran por armas fabricadas en Europa.
Las normas son aplicadas por las autoridades nacionales de cada Estado miembro, y algunos las toman más en serio que otros.
De acuerdo con Euobserver.com, el Parlamento Europeo ha tomado una iniciativa de largo alcance para imponer una nueva legislación de la UE para impulsar la supervisión. Perdió por unos 50 votos.
Hannah Neumann, eurodiputada alemana de los Verdes que redactó un informe sobre la exportación de armas, afirma que Francia es uno de los países más laxos a la hora de seguir la Posición Común de la UE.
"En Alemania, tienes un representante del gobierno que es neutral con respecto a la industria de defensa. En Francia, tienes a la industria de defensa sentada a la mesa", señaló.
Que los diputados liberales franceses, muchos de ellos del partido En Marche, del presidente Emmanuel Macron, hayan votado en contra de una mayor supervisión de la UE no es una sorpresa. Pascal Durand fue el único eurodiputado francés del grupo que votó a favor, citando razones relacionadas con su pacifismo.
Francia ha vendido armas por valor de miles de millones de euros a Arabia Saudita y a los Emiratos Árabes Unidos (EAU), a menudo incluyendo contratos de mantenimiento que se extienden a lo largo de años.
Sin embargo, precisa Euobserver.com, ambos países han sido llamados repetidamente a cometer posibles crímenes de guerra en el Yemen, donde más de 12.000 civiles han muerto en ataques selectivos desde que estalló la guerra en 2014.
Los combates en el Yemen han desplazado a millones de personas y han desencadenado una hambruna que, según se dice, ha matado a 85 mil niños en un lapso de tres años.
La disparidad plantea interrogantes sobre cómo el gobierno francés puede seguir suministrando y vendiendo armas a Arabia Saudita y a los Emiratos Árabes Unidos, y al mismo tiempo atenerse al derecho internacional humanitario que exige la UE.
Esa disparidad también se está poniendo ahora de relieve aún más tras las nuevas pruebas de que el Gobierno francés es muy consciente de los riesgos que sus armas plantean a los civiles, al tiempo que sigue entrenando a los que están detrás del gatillo.
Aviones Mirage, obuses César
El reporte difundido por Euobserver.com señala también que las pruebas apuntan al uso del Mirage 2000-2009 de fabricación francesa por parte de los Emiratos Árabes Unidos en Libia. Se sospecha que el avión de combate destruyó un centro de detención de inmigrantes en las afueras de Trípoli el año pasado, matando a docenas de personas.
También indican al obús autopropulsado César, de fabricación francesa, un avanzado sistema de armas de fuego indirecto de largo alcance adquirido por los sauditas.
Los César son producidos por el fabricante de armas del gobierno francés, Nexter Systems. A finales de 2018, el ejército saudí estacionó unos 48 en la frontera con el Yemen.
Sin embargo, un documento interno filtrado de la agencia de inteligencia militar de Francia, el DRM, advirtió de los riesgos que los Césares representan para la población civil del Yemen ya en 2018.
"La población afectada por el posible fuego de artillería: 436 mil 370 personas", señala el documento, de fecha 25 de septiembre de 2018.
En el mismo documento se dice que los Césares también desempeñan un papel de apoyo a "las tropas leales y las fuerzas armadas sauditas en su avance hacia el territorio yemenita".
"Si no fuera por el comercio y la transferencia de armas, la guerra no persistiría de la manera en que lo hace, la guerra no seguiría devastando al pueblo del Yemen de la manera en que lo ha hecho", dijo Ardi Imseis, uno de los autores del informe.
Estos hechos ya son de dominio público.
Pero lo que es nuevo es una mirada interna al vínculo invisible entre la industria armamentista francesa y sus clientes en Arabia Saudita. Y han surgido más pruebas de que se están utilizando aviones de combate Mirage de fabricación francesa en Libia.