Yemen: Naciones Unidas ignora piratería saudita
Desde principios de este año, la coalición saudita ha liberado solo tres barcos incautados con combustible para consumo público y recalcó que estos solo suministran el 3 % de la gasolina y el 6 % del diésel de la necesidad real.
Yemen denunció que la ONU continúa engañando a la opinión pública, ignorando el bloqueo y la piratería saudita de buques que transportan combustible al país.
En un comunicado, la Compañía del Petróleo de Yemen reaccionó a lo expresado en la sesión informativa al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) sobre el suministros de combustibles y criticó que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) solo se centra en las repercusiones de esta escasez mientras ignora la continua piratería marítima saudita de los buques con derivados del petróleo, el factor que ha causado la aguda escasez de suministros de combustible en Yemen.
La nota recogida el jueves por la agencia de noticias local Saba, confirmó que desde principios de este año, la coalición saudita ha liberado solo tres barcos incautados con combustible para consumo público y recalcó que estos solo suministran el 3 % de la gasolina y el 6 % del diésel de la necesidad real.
Afirmó que los daños que causó la incautación de estos tres petroleros al pueblo yemenita desde hace más de seis meses superaron los 10 millones y 240 mil dólares.
La empresa yemenita denunció que las fuerzas de la coalición todavía retienen desde hace más de ocho meses cuatro barcos petroleros, incluidos dos buques que transportan gas, uno cargado con gasolina y otro con diésel, todos para consumo público.
Los daños por esta piratería hasta la fecha ascienden a seis millones y 509 mil dólares, y se pueden incrementar con la duración del período de la incautación de estos barcos que todos cuentan con permisos de entrada al puerto de Hodeidah (oeste de Yemen), agregó.
Además, hizo un llamado a todas las personas libres del mundo para continuar presionando a la coalición liderada por Arabia Saudita para que deje de usar el asedio y el hambre como arma contra el pueblo yemenita, detenga la piratería en el mar Rojo, libere de inmediato todos los barcos incautados y permita que entraran en el puerto de Hodeidah.
El bloqueo, junto con la campaña militar que lidera Riad desde 2015, ha sumergido al país más pobre del mundo árabe en una fuerte crisis. La piratería marítima impide que los buques petroleros entreguen el combustible a Yemen, dejando a los hospitales, las estaciones de bombeo de agua, las panaderías y las gasolineras en una situación precaria.
Las autoridades yemenitas denuncian que la ONU tiene un enfoque unilateral respecto a Yemen y que ignora la situación humanitaria en este país. De hecho, acusan al organismo internacional de cerrar los ojos ante los crímenes que cometen Arabia Saudita y sus aliados árabes contra los yemenitas.