Presa del Renacimiento producirá 700 megavatios en 2022
La ministra de Estado etíope para las Tecnologías de la Información y la Economía Digital dice que la Presa del Renacimiento es el proyecto más importante que ha puesto en marcha su país entre los diversos proyectos para producir energía eléctrica.
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Presa del Renacimiento producirá 700 megavatios en 2022.
La ministra de Estado etíope para las Comunicaciones, las Tecnologías de la Información y la Economía Digital, Huria Ali Mahdi, confirmó que "Etiopía está llevando a cabo varios proyectos de energía eléctrica, el principal de los cuales es la Gran Presa del Renacimiento".
Durante su participación en la conferencia en línea Africa Tech Festival el jueves, Mahdi reveló que se espera que la presa empiece a producir 700 megavatios de electricidad el año que viene, lo que aumentará la capacidad de generación de energía instalada en el país en un 14 por ciento.
La ministra etíope había dicho anteriormente, en octubre de 2020, que se espera que la presa empiece a producir electricidad dentro de 12 meses, pero no mencionó una fecha concreta.
La capacidad de generación de energía instalada en Etiopía es actualmente de 4 mil 967 megavatios.
La construcción de la presa del Gran Renacimiento comenzó en 2011, con el objetivo de generar electricidad.
Las negociaciones entre Egipto, Etiopía y Sudán sobre la presa, de cuatro mil millones de dólares, no condujeron a un acuerdo, a pesar de que los tres países firmaron una declaración de principios en 2015, que estipulaba el compromiso de llegar a un acuerdo sobre el llenado y la explotación de la presa a través del diálogo.
El domingo, el presidente egipcio Abdel-Fattah el-Sisi hizo un llamamiento para alcanzar rápidamente un acuerdo sobre la crisis de la presa.
En un discurso en la apertura de la cuarta sesión de la Semana del Agua de El Cairo, el-Sisi señaló que la cuota de agua per cápita en Egipto no supera los 560 metros cúbicos anuales, en un momento en que la ONU definió la pobreza de agua como mil metros cúbicos.
Subrayó que Egipto es el país más seco del mundo, con el menor índice de precipitaciones entre los países, lo que obliga al país a depender exclusivamente del río Nilo, que viene de fuera de sus fronteras.
Etiopía lleva años enfrascada en difíciles negociaciones sobre la presa con Egipto y Sudán, los dos países situados aguas abajo del Nilo, que han expresado su preocupación por la escasez de agua debida a la presa.
El Consejo de Seguridad instó a Egipto, Sudán y Etiopía a reanudar las negociaciones, subrayando la necesidad de volver a la declaración de principios firmada en 2015.
