De acuerdo con datos revelados por el Departamento de Defensa de Estados Unidos, el flujo de armas hacia Arabia Saudita ha sido  constante; los contratos cerrados superaron unos 28 mil 400 millones de dólares desde marzo de 2015, incluidos unos 20 contratos aprobados por la administración del presidente Joe Biden este año, por un valor de 1 200 millones de dólares.

Arabia Saudita gastó alrededor de 34 mil millones de dólares en armas de otras partes durante el mismo periodo de tiempo. En consecuencia, las compras militares a fuentes estadounidenses se estiman en alrededor de  63 mil millones de dólares desde su agresión a Yemen hasta ahora.

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Cabe señalar que hace unos días, tres miembros del Senado de los Estados Unidos, los republicanos Rand Paul y Mike Lee y el demócrata Bernie Sanders, anunciaron que un grupo de miembros de ese ente se oponían a que la administración del presidente Joe Biden realizara un acuerdo de venta de armas con Arabia Saudita.

Ese pacto, aprobado por el Departamento de Estado de EE. UU., Incluye 280 misiles AIM-120C-7 / C-8 avanzados aire-aire de alcance medio (AMRAAM) y 596 lanzadores LAU-128,  contenedores, equipo de apoyo, repuestos y soporte técnico y de ingeniería.

Esto se produce a pesar del anuncio Biden, el 4 de febrero, de detener el apoyo a la guerra en Yemen, además de congelar la venta de armas a Arabia Saudita, en el contexto de sus esfuerzos por controlar las relaciones con ese país.