"Ni un solo militar ucraniano fue a sacarnos de los sótanos", dicen civiles en Mariúpol
"Deben mostrar al mundo entero que las tropas rusas evacuaron a todas las personas", reveló una testigo.
"Deben mostrar al mundo entero que las tropas rusas evacuaron a todas las personas. Ni un solo militar ucraniano fue a sacarnos de los sótanos. La ciudad está llena de cadáveres. Manos y pies envueltos en trapos, tirados por todas partes", dijo un testigo civil en Mariupol
Mientras la población civil sigue huyendo de las zonas de combate, la situación es especialmente complicada en la ciudad de Mariúpol, escenario de algunos de los enfrentamientos más intensos del operativo ruso en Ucrania.
A pocos kilómetros de esta urbe, una escuela se ha convertido en un centro de refugiados, un lugar donde los desplazados pueden sentirse un poco más seguros y disponer de cosas tan cotidianas como alimentos o señal telefónica.
"En un mes cambiamos cuatro veces de sótanos. Fue muy difícil en la realidad. Muy duro psicológicamente y más con un niño pequeño. Estuvimos allí desde el principio, cuando todo comenzó", relató una mujer que conversó con RT.
En el centro también se coordina la evacuación hacia otros puntos y son las propias familias las que deciden si prefieren salir en dirección a Rusia o hacia diferentes localidades de la República Popular de Donetsk, sin perder la esperanza de algún día regresar a sus hogares.
"Dijeron que el intervalo de las salidas de los autobuses es largo, toma tres o cuatro días. La gente espera hasta cinco días. Esperaremos, no podemos hacer nada más. Una vez que todo termine, volveremos a casa", aseguró un testigo.
Asimismo, los civiles desisten en sus intentos de reunirse con sus personas cercanas y dejan notas y carteles en una pizarra magnética colgada en una pared del albergue. Ahí publican el nombre de la persona a la que buscan y su propia dirección, a la espera de un posible reencuentro. "Como una esperanza escrita en este lugar", señala el corresponsal.
Además, en el centro se lleva a cabo un registro de los refugiados que llegan de Mariúpol y los que posteriormente se marchan hacia otros destinos. Esta base de búsqueda se crea "para que la gente pueda encontrarse si las familias se separan: padres, hijos, madres.
Mucha gente viene en diferentes grupos", precisó una mujer. "El Ministerio de Emergencias nos entrega listas de personas en formato electrónico y nosotros enviamos al Ministerio de Emergencias a los extraviados, y al final se encuentran", explicó el proceso.
Según palabras de los desplazados, el refugio alberga a cerca de mil personas, que reciben comida dos veces al día y aseguran que "la alimentación es excelente". "Antes nos escondíamos en sótanos y por supuesto no era así, comíamos una vez al día", indicó un hombre.
¿Qué más puedo decir? El alcalde dejó la ciudad a su suerte, dejó a la gente un mes entero sin comida, sin agua, sin luz y sin gas. No hemos visto pan en un mes, esta criatura nos abandonó
Desde la cocina explicaron que los civiles reciben raciones que contienen "pan, galletas, papilla o sopa", además de tener a su disposición bebidas calientes, mientras los niños de cero a tres años de edad reciben leche para bebés.