El  portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Saeed Khatibzadeh, condenó el informe anual del Departamento de Estado de EE. UU. sobre Irán.

En su informe anual sobre la situación de los derechos humanos en el mundo, el Departamento de Estado de EE. UU. acusó a Irán de "cometer violaciones generalizadas de los derechos humanos".

Khatibzadeh  dijo: "Está claro que no se puede esperar que la administración estadounidense, que es adicta a las mentiras, aclare los hechos existentes. Por lo tanto, la naturaleza sesgada, política e intrusiva de este informe es clara y consistente para todos y para el pueblo iraní".

El vocero señaló que la administración estadounidense, "con su historia llena de guerras, golpes, asaltos, asesinatos, secuestros, bloqueos económicos y asesinatos de inocentes en todo el mundo, ha sido un gran violador de los derechos humanos".

Agregó que Estados Unidos "derramó lágrimas de cocodrilo por el pueblo iraní, mientras que sus crímenes contra Irán, incluido el derribo de un avión de pasajeros e incitar a sus agentes  a asesinar a personas y funcionarios durante las últimas décadas, permanecerán para siempre vivos en la mente del pueblo iraní".

Indicó que la administración estadounidense "hizo la vista gorda ante las flagrantes y sistemáticas violaciones de los derechos humanos dentro de su país", y agregó que "todo el mundo ha sido testigo repetidamente de como la discriminación racial contra las minorías y los estadounidenses de piel negra se produce sistemáticamente y ampliamente en Estados Unidos".

Destacó que “la excesiva violencia de la policía y el asesinato de personas negras frente a los ojos de los ciudadanos expone el enfoque de la administración estadounidense contra los derechos humanos”.