Crece inseguridad alimentaria en población caribeña
La escasez de recursos y el alza de precios son algunos de los factores que dificultan el sostenimiento de una dieta balanceada y nutritiva en el Caribe.
Alrededor del 40 por ciento de la población del Caribe anglosajón sufre las consecuencias de la inseguridad alimentaria, según develó el miércoles último una encuesta realizada por la Comunidad del Caribe (CARICOM), y el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (WFP, por sus siglas en inglés).
La cifra porcentual corresponde a unos 2,8 millones de personas, e indica un aumento del indicador en un 72 por ciento con respecto a 2020.
“Los resultados, que destacan el impacto duradero de la pandemia dos años después, muestran un deterioro en el consumo de alimentos y las dietas con un 25 por ciento de los encuestados comiendo menos de sus alimentos preferidos, un 30 que se salta comidas o come menos de lo habitual, y un 5 por ciento que se pasa un día entero sin comer”, explicó el WFP en un comunicado oficial.
El sondeo, que tuvo 20 mil encuestados como muestra, permite conocer el impacto de la pandemia en la vida y la alimentación de las personas para reformular muchos de los objetivos principales de la región de acuerdo con el nuevo contexto.
El gerente Gerente del Programa de Desarrollo Agrícola y Agroindustrial de la Secretaría de CARICOM, Shaun Baugh, señaló la necesidad de que los Gobiernos encuentren soluciones “a corto y mediano plazo” para sus poblaciones.
“La innovación en los sistemas agroalimentarios y las cadenas de suministro regionales, junto con el apoyo continuo a los hogares más vulnerables, será esencial para mejorar la resiliencia de los sistemas alimentarios regionales para que los precios puedan mantenerse lo más estables posible”, indicó el alto funcionario.
La inflación, la escasez de recursos, el alza de precios dificultan el sostenimiento de una dieta balanceada y nutritiva. En tanto, la organización expresó que el conflicto Rusia-Ucrania puede afectar aún más el acceso a suministros por parte de las naciones caribeñas.
Una cifra ilustrativa es que el 93 por ciento de los encuestados declaró pagar alimentos a precios más altos que el monto estándar.