Rusia no se considera un país amigo de "Israel", y las recientes declaraciones del ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, sobre los orígenes judíos de Hitler "revelaron la realidad de la enemistad entre Rusia e `Israel´.

Un editorial del periódico israelí Maariv afirma que funcionarios israelíes fueron engañados por la sonrisa del presidente ruso Vladimir Putin y la cálida recepción a Benjamin Netanyahu en el Kremlin.

Al respecto dijeron que "Netanyahu estaba completamente cautivado por la amabilidad mostrada por Putin hacia él", pero esto no es un criterio de la amistad entre las dos partes.

“La neutralidad adoptada por `Israel´ en su respuesta a la operación militar rusa en Ucrania expresó la creencia y convicción de que Rusia es un país amigo, pero esto nunca fue cierto, porque las declaraciones de Lavrov revelaron la verdad”, concluyó el artículo.