Desarrollo de la humanidad retrocedió a niveles de 2016
El informe que cada año realiza el PNUD dice que la pandemia de COVID-19 y más recientemente el conflicto en Ucrania se inscriben en los problemas que agravaron la crisis.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) anunció que por primera vez en dos años consecutivos cayó el índice de Desarrollo Humano y según los expertos, es producto de la crisis que empezó con la pandemia de la COVID-19 y continúa con el conflicto ruso-ucraniano y sus efectos colaterales a nivel global.
De acuerdo con datos PNUD, encargado de realizar el estudio desde hace 32 años, el índice retrocedió a los niveles de 2016, lo que implica un gran desafío para conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que la comunidad internacional aspiraba a cumplir en 2030.
Según una nota publicada por las Naciones Unidas, en más de un 90 por ciento de los países, en 2020 o 2021, "se deterioraron indicadores como la esperanza de vida, la educación y la economía debido a la pandemia, las guerras y el cambio climático".
El retroceso es "prácticamente universal", porque aunque algunas naciones comienzan la recuperación del terreno perdido, esta es parcial y desigual, lo que amplía aún más las brechas. África Subsahariana, Asia Meridional y América Latina y el Caribe son las regiones más impactadas.
Suiza, Noruega, Islandia, Hong Kong, Australia, Dinamarca, Suecia, Irlanda, Alemania y Países Bajos ocupan los diez primeros puestos en este Índice de Desarrollo
Asimismo, explicó que existen 12 países de Latinoamérica que están en el grupo de desarrollo humano alto. Chile ocupa la posición 42. Sin embargo, Haití, específicamente está en el puesto 163.
El administrador del PNUD, Achim Steiner, apela a la solidaridad internacional para seguir avanzando en un mundo que "trata desesperadamente de responder a las sucesivas crisis" y ha advertido del riesgo de pensar sólo en el corto plazo.
En este sentido, reconoció que en momentos de inflación o de crisis energética puede ser "tentador" subvencionar los combustibles fósiles, pero considera que esto retrata los "cambios sistémicos" que el mundo necesita a largo plazo.
"Contamos con una estrecha ventana de oportunidad para reiniciar nuestros sistemas y construir un futuro con acciones decisivas ante el cambio climático y la creación de nuevas oportunidades para todas las personas", concluyó.