Líderes BRICS acuden a toma de posesión de Lula, a excepción de India
A la toma de posesión de Lula Da Silva como presidente de Brasil acudieron los líderes del BRICS, excepto la India que envió una subrepresentación. Todo parece indicar que se debe a la estrecha relación entre el primer ministro Narendra Modi y Jair Bolsonaro.
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Seguidores de Lula Da Silva le aclaman a su llegada a la ceremonia de investidura como nuevo presidente de Brasil, Brasilia, 1 de enero de 2023.
La toma de posesión de Lula Da Silva como nuevo presidente, el pasado 1 de enero, contó con la presencia de más de cinco docenas de delegaciones extranjeras, compuestas por jefes de gobierno, vicepresidentes, ministros de Asuntos Exteriores, enviados especiales y representantes de organizaciones internacionales.
Según la agencia de noticias brasileña, fue el mayor acto con personalidades internacionales de alto nivel celebrado en Brasil desde los Juegos Olímpicos de Río 2016.
Los líderes del BRICS acudieron en masa a Brasilia: los vicepresidentes de China y Rusia y el ministro de Asuntos Exteriores de Sudáfrica. La única excepción fue India. El ministro de Asuntos Exteriores, S. Jaishankar, dio prioridad a una gira por la isla mediterránea de Chipre y Austria.
El analista y exdiplomático de la India, M. K. Bhadrakumar, considera que la subrepresentación de la India probablemente se debió a las estrechas ecuaciones entre el primer ministro Narendra Modi y recién derrotado en elecciones, Jair Bolsonaro.
Anteriormente, el gobierno de Modi por alguna extraña razón invirtió mucho en Bolsonaro al recibirlo como invitado principal al Día de la República de la India en enero de 2020. Una decisión controvertida, dado el escandaloso historial de Bolsonaro en materia de misoginia y homofobia, y su perversión por atacar a los indígenas.
M. K. Bhadrakumar refiere que sigue siendo un misterio qué atrajo a la élite gobernante india hacia Bolsonaro, un exmilitar. Tal vez, ¿su imagen de "hombre fuerte" y su ideología fascista?, se cuestiona.
Por la razón que sea, ignorar el histórico regreso de Lula al poder en Brasil resulta incomprensible. No es sólo que sea, posiblemente, el estadista más carismático de un país en desarrollo, sino que, con toda seguridad, conducirá a los BRICS a un destino superior durante su mandato de 4 años, concluye el exdiplomático.
