Las sanciones obstaculizan labor humanitaria en Siria
El coordinador Residente de Naciones Unidas en esa nación pidió no politizar el tema humanitario, pues es grande el volumen de necesidades en ese país.
Las sanciones impuestas a Siria perjudican el trabajo humanitario, la situación actual es muy difícil y las necesidades son tan grandes como el resultado del propio terremoto, declaró Al-Mustafa bin Al-Maleeh, coordinador Residente de Naciones Unidas en el país.
El tema humanitario no debe politizarse en Siria, confirmó el funcionario en entrevista exclusiva con la agencia local SANA.
Siria sufre una doble crisis: las consecuencias de más de una década de guerra y el devastador evento natural, reflexionó Al-Maleeh.
Antes del terremoto, 15 millones de sirios necesitaban asistencia. Hoy, se suman las secuelas del catastrófico terremoto y miles de personas sufren otra vez el fenómeno del desplazamiento, subrayó.
Según cifras oficiales, solo en la ciudad de Alepo, —una de las más golpeadas— más de 30 mil personas están sin hogar y se resguardan en los albergues habilitados por el gobierno, escuelas, mezquitas e iglesias.
El Ejecutivo sirio brinda todas las facilidades para llevar la ayuda a todos los lugares afectados, pero necesita de esa colaboración internacional, aseguró Bin Al-Maleeh.