Los pobladores sirios en la gobernación de Sweida se agruparon este lunes, en la plaza Al-Seer, para exigir el fin del asedio impuesto por las potencias occidentales contra su país.

A la luz del devastador terremoto ocurrido el pasado 6 de febrero, los indignados condenaron el levantamiento parcial de las sanciones económicas.

En opinión del ministro de Obras Públicas, Suhail Abdel Latif, el injusto bloqueo a Siria no se corresponde con la actual catástrofe humanitaria.

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Desde el primer día del desastre natural, la cartera asignó 250 centros de acogida en las zonas afectadas, equipadas con los medios necesarios para atender las necesidades de los damnificados.

Hasta el momento, la cifra de muertos como consecuencias del sismo ocurrido en Siria y Turquía superó los 46 mil. Decenas de miles de personas resultaron heridas.

Por su parte, la Organización Mundial de la Salud anunció la recaudación de 84,5 millones de dólares para atender a las víctimas de los movimientos telúricos.