A pesar de una campaña internacional de gran repercusión en favor de su liberación, la juez Lucretia Clemons de Filadelfia denegó el viernes 31 de marzo el recurso de apelación de Mumia Abu-Jamal.

Clemons desestimó las nuevas evidencias: caso viciado por sesgos judiciales, mala conducta de la policía y la fiscalía, y sobornos y coacción a testigos clave. 

Mumia tiene 68 años y sufre numerosos problemas de salud. El periodista y exPantera Negra mantuvuo su inocencia durante las cuatro décadas en prisión tras ser condenado por asesinar a un policía.

Según la defensora de los derechos humanos, Angela Davis, en diciembre de 2018 un juez dictaminó la presentación de más de 200 cajas de materiales a la defensa de Abu-Jamal, tras descubrir de manera misteriosa pruebas exculpatorias nunca antes vistas.

De acuerdo con las evidencias, una testigo fue sobornada por su testimonio y el fiscal del caso eliminó a personas negras del jurado por motivos raciales.

Sobre la base de los nuevos argumentos, la defensa de Abu-Jamal solicitó un nuevo juicio, pues varios de los elementos aportados no estuvieron a su disposición durante la etapa inicial del litigio.

De acuerdo con algunos observadores, las nuevas demostraciones pudieron dar a Abu-Jamal su mejor oportunidad de quedar en libertad, tras haber soportado negligencias médicas y torturas durante su estancia en prisión.