Lluvias incesantes golpean la ciudad más grande de Paquistán y han cobrado la vida de más de 40 personas en Karachi desde julio.

Se estima que un millón de paquistaníes sufrieron las consecuencias de fuertes lluvias, inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra desde julio, pues el país experimentó más del 60 por ciento de su total normal de lluvias monzónicas en tres semanas, lo que provocó la muerte de más de 580 personas y miles perdieron sus hogares.

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Las provincias de Khyber Pakhtunkhwa y Sindh son las tres más afectadas, pero Baluchistán sufrió sus peores inundaciones en más de 30 años, y la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres afirmó que la provincia había recibido un 305 por ciento más de lluvia que el promedio anual.

Daños colaterales

Los paquistaníes tuvieron que dejar atrás sus hogares cuando los cultivos y el ganado fueron arrasados, y cientos de kilómetros de carreteras quedaron destruidos.

Según sus residentes, recibieron alimentos y ayuda de voluntarios y ONG, pero de ninguno de los funcionarios del gobierno, aunque el primer ministro Shehbaz Sharif visitó el área dos veces este mes y dijo: “Estamos haciendo todo lo posible para brindar un amplio alivio y rehabilitación a las víctimas de las inundaciones”.

El exmiembro del grupo de trabajo nacional sobre el cambio climático, el Dr. Pervaiz Amir, describió las inundaciones como "abrumadoras".