Un chelo y un contrabajo suenan de fondo y se encienden las linternas de cientos de móviles. "Dejen de matar a los niños en Gaza", grita el rapero de Puerto Rico René Pérez, Residente, desde el WiZink Center de Madrid, España. 

Con la voz entrecortada y al borde del llanto, el ganador de 30 premios Grammy Latinos se dejó ovacionar impávido sobre el escenario. 

El público le siguió el ritmo y el concierto continuó. Así interpretó No hay nadie como tú, Cumbia de los aburridos y Atrévete-te-te. 

"Venimos a sudar acá", gritó, "para toda la gente que lucha contra los que siguen matando". El público saltó. Algunos levantaron banderas de Palestina.

Una pantalla proyectó un dibujo de Valparaíso, Chile, donde René, inspirado, compuso las letras de su popular sencillo Latinoamérica.

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"Soy, soy lo que dejaron. Soy toda la sobra de lo que se robaron. Un pueblo escondido en la cima. Mi piel es de cuero, por eso aguanta cualquier clima". Residente cantó a América Latina, un pueblo sin piernas, pero que camina. 

Durante la velada, también entonó Vamo’ a portarnos mal, Problema cabrón, El futuro es nuestro, con acompañamiento instrumental, y 313, junto a la talentosa cantante ibérica Silvia Pérez Cruz.

Tras su paso por Madrid, y un concierto en Barcelona, el rapero estará en Nueva York, Los Ángeles y Buenos Aires, y después de tocar por casi toda América Latina y finalizar en su San Juan natal el 7 de diciembre.  

Hace casi un año, durante la última entrega de los Grammy Latinos en Sevilla, lamentó la indiferencia ante la crisis humanitaria en el Mediterráneo Oriental.

Meses después, publicó Bajo los escombros, un sencillo sobre el genocidio perpetrado por “Israel” en Palestina. 

Su creación, vinculada a la inconformidad, al enfrentamiento a los colonialismos, es un grito de esperanza para quienes buscan un mundo más justo.