No es posible sustraerse a su encanto: una vez probado el shawarma de Beirut, Líbano, es difícil imaginar un taco más delicioso.

Esta experiencia gastronómica recién recibió la calificación del sitio web Tasteatlas como el mejor sándwich del mundo con una puntuación de 4, 6 de 5 estrellas. 

Si bien su origen es incierto, aparece en escritos del siglo XIII y llegó a ser un manjar de lujo en la corte india.

No obstante, su popularización como sándwich está tejida a las calles del Imperio Otomano en el siglo XIX.

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Primero servido en plato con arroz, en la década de 1960 se convirtió en el emblemático sándwich envuelto en pan de pita y acompañado de ensalada.

Su preparación tradicional incluye una marinada de aceite de oliva, vinagre y especias (pimienta, sal, canela, comino, cilantro, cardamomo y nuez moscada) que reposa unas 12 horas.

En Líbano, contiene tarator (ajo, limón y tahini) y verduras crudas (tomate, lechuga, cebolla, pepino y perejil).  

Además de esta versión, existen otras variantes: la siria (con salsa de cardamomo), la griega (con tzatziki), la iraní (chelow kebab con brochetas de ternera y pan de pita).

He aquí otra de las expresiones culinarias del Mediterráneo Oriental, extendida y apreciada en todo el mundo.