Días de incertidumbre para el Caribe. El huracán Beryl tocó tierra en la isla de Carriacou, Granada, tras convertirse en la primera tormenta categoría cuatro en formarse en este punto del Atlántico.

Con vientos de hasta 241 kilómetros por hora, arrancó árboles y voló techos en la región suroeste del archipiélago.

Los territorios cercanos emitieron advertencias mientras miles de personas buscaban refugio en hogares más seguros y centros de acogida. 

Por su parte, los socorristas movilizaron la evacuación de pacientes de un hospital tras reportes de daños en un piso inferior. 

Desde San Vicente y las Granadinas, el medio NBC Radio informó sobre afectaciones en escuelas a medida que las comunicaciones empeoraban. 

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En Barbados, las autoridades reportaron más de una docena de incidentes con vegetaciones afectadas y postes eléctricos derribados en toda la isla.

Hasta ahora, está vigente una alarma para Santa Lucía y Martinica, y otra alerta para toda la costa sur de Haití y el oeste de República Dominicana.

Este es el segundo temporal con nombre en el año, tras Alberto, que pasó por el noreste de México el 20 de junio.

No obstante, este tipo de fenómenos son inusuales para la actual época del año, pues generalmente comienzan a partir de agosto.

Beryl es el huracán más oriental formado en el Atlántico tropical durante el mes de junio, superando un récord de más de 90 años.

A finales de mayo, los científicos pronosticaron para el 2024 un 85 por ciento de posibilidades de temporada ciclónica más activa de lo normal.