Disminuye ritmo de los combates en Deir Ezzor, Siria
Las Fuerzas Democráticas Sirias trajeron refuerzos sin precedentes a la ciudad de Dhiban y atacaron durante varios días con diversos tipos de armas a las tribus árabes al este de la nación levantina.
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Miembros de las Fuerzas Democráticas Sirias.
El ritmo de los enfrentamientos entre los combatientes de las tribus árabes y las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) disminuyó en la ciudad de Dhiban, en el extremo oriental de Deir Ezzor.
Los efectivos al servicio de la ocupación estadounidense lograron imponer su control sobre la referida urbe, donde está ubicada la sede de la casta Al-Aqidat y la oficina de su jefe tribal Ibrahim Al-Hafel.
Fuentes sobre el terreno reportaron combates intermitentes en la ciudad de Al-Tayana. Las FDS continúaron empeñadas en retomar el control de la zona pese a abandonar más de 20 ciudades y aldeas colindantes con la frontera iraquí.
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Por su lado, los combatientes de las tribus decidieron retirarse en la tarde del miércoles de la ciudad de Dhiban para preservar las vidas de niños, mujeres y ancianos.
Además, acusaron a la llamada coalición internacional de ponerse del lado de las FDS y alentar prácticas inaceptables en sus territorios.
Con posterioridad, el jeque Ibrahim Al-Hafel emitió una declaración de audio en la cual negó haber abandonado sus posiciones y enfatizó la continuidad de la batalla contra las fuerzas invasoras.
También rechazó rumores sobre nuevas negociaciones con la alianza extranjera, a la cual llamó a asumir su papel de control de la seguridad y la estabilidad de la región.
En Dhiban, Al-Izba, Al-Busaira y Jadid Bakara, las confrontaciones armadas provocaron muertos y heridos en los lados contendientes.
