Burkina Faso aprueba en proyecto de ley el envío de tropas a Níger
La legislación permite enviar una fuerza militar a la nación hermana por un período de tres meses, renovable.
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Soldados de Níger, en Niamey, la capital.
El gobierno de transición de Burkina Faso aprobó un proyecto de ley para permitir el envío de tropas al vecino país de Níger, en caso de necesitar su apoyo para enfrentar una invasión.
Niamey encara el peligro de una posible intervención militar organizada por la Comisión Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) con intenciones de reponer al presidente depuesto por la Junta Militar de Transición.
La nueva ley permite a Burkina enviar una fuerza militar por un período de tres meses, renovable por interés de ambas partes.
Este marco legislativo facilita el rápido despliegue de sus fuerzas para proporcionar "asistencia militar a la República de Níger en caso de agresión o desestabilización por parte de un ejército externo".
De igual modo, el nuevo decreto avala la participación en territorio nigerino en operaciones contra el terrorismo, según explicó el ministro de Defensa, Kassoum Coulibaly.
La crisis en Níger comenzó el pasado 26 de julio cuando la guardia presidencial destituyó al presidente Mohamed Bazoum, y otorgó el mando al general Abdourahmane Tchiani, quien también asumió la presidencia del Consejo Nacional Interino para la Salvaguardia de la Patria.
En este contexto, la CEDEAO recurrió a la implementación de una campaña de presión total sobre el país, con el cierre de las fronteras terrestres y aéreas entre las naciones del bloque y Níger.
Además estableció la suspensión de todas las transacciones comerciales y financieras, y la congelación de los activos del país en sus bancos.
El bloque dio a los líderes golpistas de Níger una semana para restituir al mandatario detenido o la comunidad utilizaría "todas las medidas", incluidas las militares, para "restablecer el orden" en la nación africana.
Por su parte, los gobiernos militares de Malí y Burkina Faso, vecinos de Níger, advirtieron que cualquier intervención en el país hermano sería considerada una declaración de guerra contra ellos.
