Reportan graves heridos entre los colonos israelíes en Cisjordania
Los grupos de resistencia Guarida de los Leones catalogaron el Diluvio de Al-Aqsa como la batalla de todos los palestinos y llamaron a no permitir a los colonos moverse con libertad en la Cisjordania ocupada.
Cuatro colonos resultaron heridos, dos de ellos en estado grave, durante el bombardeo al asentamiento de Beitar Illit, en Cisjordania, al sur de Jerusalén, confirmaron este lunes los medios israelíes.
En el mismo contexto, jóvenes palestinos enfrentaron a las fuerzas sionistas en el puesto de control militar de Beit El, al norte de la ciudad de Ramallah, lo cual provocó su cierre y cinco de los atacantes resultaron heridos por balas reales, informaron fuentes locales.
También hubo enfrentamientos armados entre combatientes de la resistencia palestina y soldados de ocupación en las calles de Beit Ummar, al norte de Hebrón.
Los grupos de resistencia Guarida de los Leones dijeron en una declaración: "El Diluvio de Al-Aqsa es la batalla de todos los palestinos, y es la gran batalla de la liberación".
Según su mensaje, la resistencia debe pasar de la etapa de defensa a la ofensiva en Cisjordania, y llamó a los combatientes a realizar operaciones de tiro contra la ocupación, a las 19:00, hora local, de este lunes, en todos los lugares.
En Cisjordania, el número de mártires aumentó a 16 después del asesinato del joven Ahmed Khaled Ibrahim Abu Turki (28 años) por balas israelíes cerca de la ciudad de Hebrón.
Asimismo, llamaron a los palestinos a ampliar el enfrentamiento con el ente sionista y sus colonos y encender las zonas de contacto, en apoyo a la resistencia y en respuesta a las masacres contra Gaza, en especial lo crímenes en los campamentos de Al Shate y Jabalia esta tarde.
Los llamados en Cisjordania enfatizaron la necesidad de enfrentar los ataques de los colonos y no dejarlos deambular con seguridad por las calles de esa región.
En un recuento actualizado de las víctimas de la agresión israelí al tercer día de la batalla Diluvio de Al-Aqsa, el Ministerio de Salud palestino informó que 560 ciudadanos fueron martirizados y otros dos mil 900 resultaron heridos con politraumatismos, la gran mayoría son civiles, incluidos niños pequeños.