Biden enfrenta la mayor prueba en Medio Oriente tras ataque a Yemen
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, está bajo presión para decidir cualquier tipo de acción militar en Yemen y evitar la guerra en la región es su mayor prueba, consideró un informe de Bloomberg.
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Aviones y buques de guerra estadounidenses y británicos llevaron a cabo ataques contra múltiples objetivos en Yemen.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, enfrenta su mayor prueba hasta ahora sobre su capacidad para evitar una guerra más amplia en el Medio Oriente a raíz de la agresión a Yemen.
De acuerdo con un informe publicado por Bloomberg, Biden fue sometido a presiones destinadas a empujarlo a decidir sobre algún tipo de acción militar, tras repetidas advertencias de no lograr disuadir los ataques yemenitas en el Mar Rojo.
Un funcionario militar en Washington confirmó a Fox News que el ataque conjunto a Yemen no habría sido posible sin el apoyo de Australia, Bahréin, Canadá y los Países Bajos.
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Al amanecer de este viernes, Estados Unidos y Reino Unido lanzaron una agresión militar contra la capital yemenita, Saná, y las gobernaciones de Hodeidah, Sadah, Dhamar, Taiz y Hajjah. La acción dejó un saldo de cinco combatientes muertos y seis heridos.
Según el Comando Central de los Estados Unidos, las incursiones apuntaron a sistemas de comunicaciones estratégicas y sitios de lanzamiento de misiles, sistemas de radar, defensa antiaérea, así como sitios de almacenamiento y lanzamiento de aviones no tripulados, misiles de crucero y misiles balísticos.
A su vez, el comandante de la Fuerza Aérea Central y las Fuerzas Conjuntas, general Alex Greenwich, reportó el ataque contra más de 60 objetivos en 16 ubicaciones distintas y empleo de más de 100 bombas y misiles de varios tipos.
La Casa Blanca anunció en un comunicado que 10 países participaron en la agresión, junto con Estados Unidos y Reino Unido a saber, Australia, Bahrein, Canadá, Dinamarca, Alemania, los Países Bajos, Nueva Zelanda y Corea del Sur.
Estos gobiernos decidieron formar parte de la "Alianza para la Prosperidad" lanzada por los Washington en el mar Rojo “para proteger la navegación de los barcos israelíes” a la luz de los ataques yemenitas contra barcos en dirección a los puertos de la entidad sionista.
Por su parte, el portavoz de las fuerzas armadas yemenitas, general de brigada Yahya Sari, responsabilizó a Estados Unidos y Reino Unido de la agresión criminal contra el país.
Washington y Londres cometieron un error al librar la guerra en Yemen al no tener en cuenta experiencias anteriores, señaló el miembro de la oficina política del movimiento Ansar Allah, Mohammad al-Bukhaiti.
